Impacto arancelario en la industria automotriz: ¿Qué está pasando?

La industria automotriz en Estados Unidos y México se encuentra en un estado de creciente preocupación ante la posible imposición de aranceles por parte del gobierno estadounidense. Expertos de la Industria Nacional de Autopartes (INA) advierten que estas medidas podrían tener consecuencias significativas en los precios de los vehículos y en el volumen de ventas.

¿Cómo afectarían los aranceles a los consumidores estadounidenses?

Según la INA, los aranceles del 25% podrían incrementar el precio promedio de un automóvil en Estados Unidos en aproximadamente $3,000 dólares. Esta situación, como se menciona en un artículo de El Imparcial (2025), podría llevar a una reducción de hasta 1 millón de unidades vendidas en 2025. El impacto económico para los consumidores estadounidenses podría superar los $20 mil millones de dólares, afectando la disponibilidad de productos y generando interrupciones en las cadenas de suministro.

El golpe a las marcas de lujo

Armando Soto, director general de Kaso y Asociados, señala que las marcas de lujo serían las más perjudicadas. «El promedio de las unidades que exporta México anda arriba de los 40 mil 800 dólares. Con aranceles, estás hablando de 10 mil dólares más y hay marcas como Audi cuyo precio promedio anda arriba de 50 mil dólares; Cadillac, 55 mil dólares. Las unidades de lujo van a ser las más afectadas», explica Soto (El Imparcial, 2025). Estos vehículos, que a menudo superan los $50,000 dólares, incorporan componentes provenientes de Europa y Asia, lo que los hace particularmente vulnerables a los aranceles.

¿Y qué hay de México? Posibles escenarios

Guillermo Rosales, presidente ejecutivo de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), anticipa que el impacto en los precios de los vehículos en México dependerá de dos posibles escenarios:

  1. Estados Unidos impone aranceles a las autopartes fabricadas fuera de su territorio: Esto incrementaría los costos de manufactura en toda la región, afectando tanto a México como a Canadá.
  2. México responde con aranceles a productos estadounidenses: Aunque poco probable, esta represalia podría generar una guerra comercial que impactaría los precios de los vehículos en ambos países.

Sin embargo, Rosales aclara que el gobierno mexicano está buscando alternativas para evitar una confrontación arancelaria con Estados Unidos (El Imparcial, 2025).

Estrategias de las armadoras para mitigar el impacto

Ante este panorama, Luis Brizuela, director comercial de JATO Dynamics México, sugiere que las armadoras podrían optar por reducir el equipamiento y la tecnología de los vehículos para contener los precios. «Cuando ocurrió la crisis de los semiconductores, para seguir desplazando inventario muchas armadoras desmontaron componentes de los vehículos para reducir el precio y lograr desplazarlo. En un escenario potencial de que los aranceles se implementen, un componente en particular que podría ser eliminado del vehículo darle para mayor agilidad al inventario es la tecnología», indica Brizuela (El Imparcial, 2025).

Implicaciones a largo plazo y alternativas

La imposición de aranceles no solo afectaría a los consumidores y a las armadoras, sino que también podría tener consecuencias a largo plazo en la competitividad de la industria automotriz en América del Norte. Expertos sugieren que es crucial que los gobiernos de Estados Unidos y México exploren alternativas que fomenten el comercio justo y eviten medidas proteccionistas que puedan dañar la economía regional.

En un mundo cada vez más globalizado, la cooperación y el diálogo son fundamentales para superar los desafíos económicos y construir un futuro próspero para todos.