La CGT intensifica la presión: Paro general de 36 horas sacude a Argentina en abril de 2025

En un escenario de creciente tensión social y económica, la Confederación General del Trabajo (CGT), junto con las dos Centrales de Trabajadores de la Argentina (CTA), está intensificando su pulso con el gobierno de Javier Milei. Se está anunciando un paro general de 36 horas que promete paralizar gran parte del país el 9 y 10 de abril de 2025. Esta medida, según lo informado por ámbito.com, representa la tercera gran acción de fuerza de la central sindical contra las políticas del actual gobierno (ámbito.com, 2024).

Un paro extendido en solidaridad con los jubilados

Originalmente planeada como una huelga de 24 horas, la CGT está decidiendo extender el paro a 36 horas, comenzando al mediodía del miércoles 9 de abril. Según fuentes de la organización, esta extensión está siendo motivada por el deseo de unirse a la marcha de jubilados que tradicionalmente se realiza en las inmediaciones del Congreso durante esas fechas. Se está buscando así dar mayor visibilidad y fuerza a las demandas de este sector vulnerable de la sociedad.

¿Qué servicios se verán afectados?

El impacto del paro se está previendo que sea significativo en diversos sectores. Si bien la Unión Tranviarios Automotor (UTA) aún está deliberando su adhesión, ya se está confirmando la participación de los sindicatos ferroviarios y los metrodelegados del subte de la Ciudad de Buenos Aires. El Sindicato de Peones de Taxi también está confirmando su participación, lo que está sugiriendo un caos en el transporte público.

Además del transporte, la huelga está afectando también a los bancos, la administración pública, el transporte aéreo y la educación. La Asociación Bancaria ya está anunciando que no habrá atención al público en ninguna entidad bancaria, ni pública ni privada, en todo el país, limitando las operaciones al home banking. Por otro lado, la postura del Sindicato de Empleados de Comercio está permaneciendo incierta, dado que su líder, Armando Cavalieri, no está participando de las reuniones clave de la CGT.

Posibles Escenarios y Excepciones

Aunque se está esperando que la mayoría de los comercios permanezcan cerrados, se está previendo que algunos supermercados abran sus puertas, aunque con personal reducido debido a las dificultades de transporte. En el ámbito de la salud, hospitales y centros de salud están operando con servicios de guardia mínimos para atender urgencias, reconociendo su rol como servicios esenciales.

El sector aéreo y la educación en la mira

El transporte aéreo comercial se está sumando a la medida de fuerza, con la participación de sus 12 gremios, incluyendo a los controladores aéreos. Estos últimos, sin embargo, están obligados a prestar un 45% de su servicio, ya que son considerados personal esencial. En el ámbito educativo, la Confederación de Trabajadores de la Educación (Ctera) se está adhiriendo al paro, al igual que otros gremios docentes de alcance nacional. El impacto en las escuelas privadas dependerá en gran medida de la disponibilidad de transporte.

Recolección de residuos y administración pública: servicios interrumpidos

La recolección de residuos estará suspendida hasta la medianoche del 11 de abril, cuando se espera que se reanude el servicio. No obstante, podrían existir excepciones en municipios donde el servicio no depende directamente de los camioneros o del sindicato local de recolectores. En cuanto a la administración pública, los gremios estatales UPCN y ATE están confirmando su participación, lo que significará la suspensión de la atención al público y la actividad en organismos estatales, municipios y hospitales.

Repercusiones y negociaciones en curso

Mientras tanto, las negociaciones entre la UTA y los sectores empresariales están continuando, buscando evitar una paralización total del servicio de colectivos. La Secretaría de Trabajo nacional ya dictó la conciliación obligatoria la semana pasada, luego de que la UTA amenazara con un paro el 28 de marzo en reclamo de mejoras salariales.

El paro general de la CGT está representando un desafío significativo para el gobierno y para la sociedad en su conjunto. Se está observando de cerca el desarrollo de los acontecimientos y las posibles negociaciones que puedan surgir en los próximos días.