La nueva tierra prometida se encuentra en China. Así lo intuye la Junta de Andalucía, dispuesta a enamorar a las empresas del gigante asiático para que inviertan en la región. Los primeros contactos se han realizado esta semana y el optimismo es notable, especialmente en el sector automovilístico y aeronáutico.

¿Qué podemos esperar?

Las expectativas en estos dos ámbitos son muy positivas y pronto se esperan buenas noticias, según ha podido conocer este periódico. Esta sensación se desprende de la importante ronda de encuentros celebrada esta semana, encabezada por el presidente de la Junta, Juanma Moreno, y el alcalde de Sevilla, José Luis Sanz.

Reunión con Yin Li

Moreno recibió en Sevilla a Yin Li, miembro del Buró Político del Comité Central del PCCh y secretario del Comité Municipal del PCCh de Pekín. En esta cita, según el Ejecutivo andaluz, se abordó cómo "fortalecer la cooperación" entre Andalucía y China, que es actualmente su noveno destino de exportaciones, con un valor de 1.133 millones de euros en 2023.

Inversiones para la transformación económica

El Gobierno andaluz busca impulsar inversiones del gigante asiático para consolidar la transformación económica que, en los últimos años, ha tenido a la industria como protagonista. La intención, desde San Telmo, es aumentar el peso de esta actividad económica en una región donde el turismo y la agricultura han sido tradicionalmente los principales motores.

Desde 2018, este peso ha crecido en dos puntos; en la actualidad, la industria representa el 13,5% de la economía andaluza. Los polos de desarrollo se están ampliando: de los tradicionales Cádiz y Sevilla a Huelva, que está despegando gracias al interés en el desarrollo del hidrógeno verde.

Un buen ejemplo es la decisión de Maersk de asociarse con Cepsa para construir la mayor planta de metanol de Europa en Huelva, con una inversión de 1.000 millones de euros.

La magnitud de China permite soñar con nuevas inversiones de gran envergadura. Y las empresas asiáticas han demostrado estar interesadas en la comunidad: la última gran operación fue la compra, en marzo, de la planta de Airbus en Puerto Real (Cádiz) por parte del grupo Zhenshi. Una operación que se considera un primer paso en la zona.

La automoción en el punto de mira

Mientras tanto, la capital andaluza está apostando por el sector de la automoción. El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, ha viajado esta semana a la ciudad china de Chongqing, con la que ha firmado un acuerdo de hermanamiento. Allí se ha reunido con tres grandes empresas del sector: Changan Automobile, China Automotive Engineering Research Institute y Landai Technology Group.

Changan y Landai cuentan con un negocio conjunto que supera los 19.600 millones de euros anuales. Landai, dedicada principalmente a la fabricación de pantallas táctiles y a la venta de sistemas de transmisión de potencia, cuenta con clientes como Amazon, Lenovo y Hacer.

Por su parte, Changan destaca por su reciente alianza con Huawei para desarrollar software para vehículos inteligentes y componentes que, según Reuters, podría alcanzar una valoración de 32.000 millones de euros.

"Ya han mostrado interés en conocer los beneficios y ventajas competitivas de Sevilla", afirman fuentes del Ayuntamiento sobre estas empresas. El objetivo de Sanz es que inviertan en la ciudad, ya sea abriendo sedes o realizando investigaciones en el PCT Cartuja, el primer parque de actividad económica de España, con una facturación de 4.500 millones de euros y casi 600 empresas.