Los ejecutivos españoles están pilotando las multinacionales a un ritmo cada vez mayor. Actualmente, una veintena de ellos ocupan los puestos más altos en grandes organizaciones extranjeras, una cifra que ha aumentado un 40% en la última década, según cálculos de Negocios.
El auge de los directivos españoles
Este auge se debe a la capacidad de adaptación y agilidad de los directivos españoles, que se han convertido en referentes en un mundo cada vez más cambiante y turbulento. Según Luis Urbano, socio de la firma de cazatalentos Heidrick & Struggles, los españoles son mucho más flexibles que sus homólogos franceses o alemanes, lo que les permite desenvolverse mejor en entornos de incertidumbre y volatilidad.
Además de la capacidad de adaptación, los directivos españoles también destacan por su visión estratégica, su espíritu innovador y su gran agilidad en la toma de decisiones. Estas cualidades les han llevado a ocupar puestos de responsabilidad no solo en las cúpulas de las grandes corporaciones, sino también en áreas funcionales y de negocio globales.
- Joaquín Duato, consejero delegado de Johnson&Johnson
- Ramón Laguarta, de Pepsico
- Enrique Lores, de HP
- Belén Garijo, presidenta y consejera delegada de Merck
- Miguel Ángel López Borrego, de ThyssenKrupp
Mujeres en puestos de responsabilidad
Otro aspecto destacable es el aumento del número de mujeres en puestos de responsabilidad en las organizaciones extranjeras. En 2014, Belén Garijo era la única española que ocupaba un cargo tan relevante en una compañía cotizada en la Bolsa de Fráncfort. Hoy, a Garijo se suman Paloma Alonso, líder de la firma alemana All4Labels, y otras dos directivas.
Según Luis Urbano, el ascenso de la mujer a cargos de gran responsabilidad es uno de los cambios más destacados de los últimos años. Las mujeres ocupan puestos muy relevantes y lo hacen antes de los 50 años. Normalmente, tienen un área donde son grandes especialistas y a menudo experiencia como emprendedoras, lo que les aporta una diferenciación.
El sacrificio personal y familiar
La carrera internacional exige un sacrificio personal y familiar enorme. Es el principal inconveniente según todos los directivos consultados. No hay excepción. Pese a que muchos de ellos tengan a su disposición el avión privado de la compañía, los constantes viajes dificultan la vida en familia. "Cada mes viajo a dos o tres continentes. Tengo una casa en el sur de California donde como mucho estoy una semana al mes", indica el consejero delegado de Hyundai, que dedica buena parte de los fines de semana para volar de Estados Unidos a Corea o a Europa.
Pero las cosas están cambiando y quizás en la actualidad ese sacrificio no sea tan necesario, al menos en algunos casos, declara Belén Garijo. "Me he preocupado por dar un entorno de flexibilidad para que no tengamos que expatriar familias. Hay que desterrar los mitos. Porque si lideras una compañía francesa no tienes que trabajar en Francia. Excepto que la posición lo exija al 100%, como ocurre con Estados Unidos, que es muy difícil de dirigir desde Europa, se puede llevar una región desde el país de origen, como hace Marieta Jiménez con Europa desde España", señala.
La expansión del teletrabajo (al 50% en el caso de Merck) facilita la vida a muchos ejecutivos, que pueden residir cerca de su familia. Es el caso de Carlos Olave, responsable mundial del área de recursos humanos de LG Electronics, que tras seis años viviendo en Seúl ha regresado a Madrid.
La geopolítica, el nuevo caballo de batalla
La geopolítica se ha convertido en el principal caballo de batalla con el que tienen que lidiar los altos ejecutivos de todo el mundo. "Cuando empecé a trabajar, el entorno era estable. No había tantos cambios políticos, de regulación... Ahora, con la inestabilidad, es mucho más difícil porque tienes que conseguir objetivos navegando en situaciones regulatorias cambiantes y en países donde hay conflictos como Oriente Medio", explica el consejero delegado de Hyundai.
"El entorno es muy diferente. Hoy los temas geopolíticos son centrales en nuestra estrategia. El entorno regulatorio influenciado por el geopolítico hace que en cada transacción se consideren elementos que antes no eran tan críticos", apoya Belén Garijo.
El sueldo, un aliciente para la carrera internacional
El sueldo es uno de los alicientes de la carrera internacional para los españoles. Y lo que impide que muchos de ellos regresen a su país natal si quieren mantener su nivel de vida. La base de datos de la aseguradora AON muestra las diferencias que se observan en la remuneración del directivo medio en una decena de países.
País | Salario fijo | Remuneración variable a corto plazo | Total |
---|---|---|---|
España | 200.000 € | 257.000 € | 300.000 € |
Estados Unidos | 287.000 € | - | 482.000 € |
Arabia Saudí | - | 462.000 € | 600.000 € |
Singapur | 310.000 € | 456.000 € | 572.000 € |
Como se puede observar, el salario de los directivos españoles es significativamente más bajo que el de sus homólogos en otros países. Esto dificulta su regreso a España, donde es imposible mantener el mismo nivel de vida.
Conclusión
Los directivos españoles están consolidando su presencia en las cúpulas de las multinacionales. Su capacidad de adaptación, su agilidad y su visión estratégica les han convertido en referentes en un mundo cada vez más cambiante y turbulento. Sin embargo, la carrera internacional exige un sacrificio personal y familiar enorme, y el sueldo sigue siendo un aliciente para muchos españoles que deciden no regresar a su país natal.