El BCE da por hecho un recorte de los tipos de interés el jueves
El Banco Central Europeo (BCE) ya no teme caer en la "trampa de la inflación" que tanto preocupaba en septiembre y todo apunta a un nuevo recorte de los tipos de interés en su reunión de mañana.
La incertidumbre sobre el crecimiento en la zona euro y la moderación de los precios han acelerado los recortes, que analistas y mercado de futuros dan por hecho en la reunión de mañana.
"Qué será, será"
La presidenta del BCE, Christine Lagarde, dio una pista sobre el posible recorte de tipos en la reunión del mes pasado cuando, preguntada por si el banco movería los tipos de interés en octubre, tarareó en español "Qué será, será". Nadie esperaba una respuesta clara, pero el gesto dejaba entrever que el BCE no descartaba un nuevo recorte.
En aquel momento, parecía que el BCE podría hacer una pausa en octubre hasta recabar más datos sobre la marcha de los precios. Pero la moderación de los precios y la mayor incertidumbre sobre el crecimiento han llevado al BCE a cambiar de rumbo.
Moderación de los precios e incertidumbre sobre el crecimiento
La inflación de la zona euro retrocedió con fuerza en septiembre hasta el 1,8%, por debajo del objetivo del BCE por primera vez en tres años. Esta moderación de los precios ha sido una sorpresa para el BCE, que esperaba que fuera más gradual.
Además, la incertidumbre sobre el crecimiento ha aumentado en las últimas semanas. El índice PMI que mide la actividad manufacturera cayó en septiembre a su peor nivel, lo que indica que la industria está sufriendo una desaceleración. Los problemas de la industria están golpeando especialmente en Alemania, que ya está en recesión.
La moderación de los precios y la mayor incertidumbre sobre el crecimiento han llevado al BCE a cambiar de tono. En su intervención ante el Parlamento Europeo hace dos semanas, Lagarde expresó una "confianza reforzada" en que los precios se dirigen a una fase de estabilización.
División en el BCE sobre los futuros recortes
Aunque la mayoría de las declaraciones del BCE están a favor, o al menos no en contra, de un recorte de tipos en octubre, las divisiones parecen grandes sobre lo que viene después.
El eslovaco Peter Kazimir y el belga Pierre Wunsch han sido los únicos que han expresado públicamente ciertas dudas sobre una nueva reducción del precio del dinero. "Es probable que ahora esto se vea agravado por los renovados riesgos geopolíticos y el reciente aumento de los precios del petróleo", señala Rubén Segura-Cayuela, economista jefe de Bank of America para Europa.
El repunte del barril de crudo ante un posible recrudecimiento del conflicto en Oriente Próximo ha añadido algo de ruido a los días previos a la reunión. Sin embargo, el anuncio de Israel de que sus represalias contra Irán no incluirán instalaciones petrolíferas, unido a la menor demanda de China, ha desinflado el barril de brent hasta los 74 dólares, cerca del nivel donde se encontraba antes de que Irán lanzara misiles balísticos contra Israel.
La decisión del BCE también será seguida con atención por los hipotecados y aquellos interesados en pedir un préstamo. El euríbor está experimentando fuertes caídas, lo que reduce las cuotas y alienta una guerra hipotecaria entre los bancos, con algunos clientes obteniendo ya financiación a un interés por debajo del 3%. Tras dos años sin tregua, los analistas creen que ese oxígeno puede alimentar las operaciones inmobiliarias, lo cual puede también dificultar el abaratamiento de los precios.