Declaración de la Renta 2024: Una guía esencial para inversores
A medida que se acerca la campaña de la Declaración de la Renta 2024, los inversores se están preparando para rendir cuentas ante la Agencia Tributaria. Según Nuria Salobral, periodista de Cinco Días, el proceso puede parecer abrumador dada la complejidad del panorama de inversiones actual.

Entendiendo la base del ahorro y sus gravámenes
El gravamen de la base del ahorro, que comprende las ganancias patrimoniales y los rendimientos del capital mobiliario, se encuentra actualmente entre el 19% y el 28%, dependiendo del monto. Sin embargo, es importante tener en cuenta que, según informa El País, este último porcentaje subirá al 30% en la renta de 2025 para ganancias que superen los 300.000 euros. Es crucial, por lo tanto, planificar estratégicamente las inversiones para minimizar el impacto fiscal.
Tipos de rentas y su tributación
Existen dos grandes categorías de rentas a considerar: las ganancias patrimoniales (compraventa de acciones, fondos, inmuebles) y los rendimientos del capital mobiliario (depósitos, bonos, seguros, dividendos). Los rendimientos del capital pueden reducirse descontando los gastos de administración y custodia de los activos.

En cuanto a las inversiones en Bolsa, las plusvalías se consideran ganancias de capital y están sujetas al gravamen general del ahorro. Los dividendos, por otro lado, se consideran rendimientos del capital mobiliario. En el caso de los *scrip dividend*, el cobro en metálico tributa como rendimiento del capital mobiliario, mientras que la opción de cobro en acciones no tributa al recibirlas, sino al venderlas, considerándose entonces como ganancia o pérdida patrimonial.
Inversiones inmobiliarias: Vivienda habitual y alquileres
Las ganancias por la venta de una vivienda habitual están exentas si se reinvierten en otra vivienda en un plazo de dos años. Esta exención se mantiene incluso si el contribuyente se ha divorciado y su excónyuge ocupa la vivienda. La deducción por hipoteca solo aplica a quienes adquirieron su vivienda habitual antes de 2013, permitiendo deducir el 15% de lo abonado, con un máximo de 9.040 euros.
Para los propietarios de viviendas en alquiler, las rentas ingresadas se gravan en la base general, no en la del ahorro. La reducción general por alquiler es del 50%, pero puede aumentar hasta el 90% en zonas tensionadas si se reduce la renta al inquilino en al menos un 5%. También se pueden deducir gastos como el IBI, la comunidad o las obras de mejora.
Fondos cotizados (ETF) y criptoactivos: Nuevas formas de inversión, nuevas obligaciones fiscales
Los fondos cotizados o ETF tributan como ganancias patrimoniales, pero a diferencia de los fondos de inversión tradicionales, no permiten el traspaso sin tributar. Cualquier reembolso está sujeto al pago de impuestos.
Los criptoactivos también están sujetos a tributación, existiendo incluso una casilla específica en la declaración de la renta (1800-1814) para declarar ganancias o pérdidas patrimoniales derivadas de estas inversiones. La plusvalía está sujeta a los tipos del ahorro (19%-28%). La Agencia Tributaria exige detallar las ganancias o pérdidas si la moneda virtual se ha cambiado por moneda de curso legal, por otra criptodivisa, por un bien o servicio, o si se han registrado pérdidas por no devolución o quiebra de la plataforma. Además, si se poseen criptodivisas en plataformas extranjeras con un saldo superior a 50.000 euros, es obligatorio declararlo a través del modelo 721.
Inversiones en el extranjero y doble imposición
Es obligatorio informar a Hacienda sobre bienes, inmuebles, cuentas, depósitos o valores en el extranjero si el saldo acumulado supera los 50.000 euros, a través del modelo 720. El País señala que es fundamental evitar la doble imposición, comunicando a la entidad extranjera que la residencia fiscal está en España. Si ya ha habido retención en el extranjero, el importe satisfecho se deducirá en la declaración de la renta.
«En la declaración de la renta deben constar todas las ganancias patrimoniales y rendimientos del capital cosechadas en el año, con independencia de si se obtuvieron en el extranjero», afirma Paula Satrústegui, socia de asesoramiento patrimonial de Abante Asesores.
Compensación de plusvalías y minusvalías: Una estrategia clave
Una estrategia crucial para reducir el pago de impuestos es la compensación de plusvalías con minusvalías. Se pueden compensar plusvalías y minusvalías primero en el bloque de las ganancias patrimoniales (vivienda, Bolsa, acciones, capital riesgo, criptoactivos, oro, derivados) y luego en el de rendimientos del capital (seguros, depósitos, bonos, dividendos). Las minusvalías pueden compensar plusvalías en el ejercicio actual y durante los cuatro años siguientes. La declaración de la renta de 2024 es la última oportunidad para compensar minusvalías pendientes del ejercicio 2020.
Planes de pensiones: Cambios en la fiscalidad
Desde 2022, la aportación máxima a planes de pensiones individuales por la que el contribuyente se puede deducir en la declaración de la renta es de 1.500 euros. Se pueden sumar otros 8.500 euros de aportación a un plan de pensiones de empleo, aunque no siempre es fácil alcanzar la deducción total de 10.000 euros. La cuantía que el trabajador puede aportar al plan de empleo depende de lo que aporte su empresa y de la aplicación de determinados coeficientes.