El clamor por la equidad impulsa el respaldo a los aranceles en Estados Unidos
El debate sobre la aplicación de aranceles en Estados Unidos está ganando intensidad, impulsado por un creciente sentimiento de que el comercio internacional debe ser más justo. Según un artículo de Milenio, la opinión pública estadounidense sobre los aranceles varía significativamente dependiendo de cómo se plantea la pregunta. Cuando se enfatiza el potencial aumento de precios, el apoyo disminuye, pero cuando se mencionan prácticas comerciales desleales y disparidades arancelarias con otros países, el respaldo aumenta considerablemente.

La percepción de justicia frente a la inflación
Rana Foroohar, en su columna para Financial Times, explora esta dicotomía, señalando que la administración Trump ha argumentado que Estados Unidos está operando bajo un sistema arancelario obsoleto. «Si se trata de ‘justicia’ en lugar de ‘inflación’, las opiniones cambian», afirma Foroohar.
El informe de Stephen Miran, director del Consejo de Asesores Económicos del Presidente, citado en el artículo, subraya que la participación de Estados Unidos en el PIB mundial ha disminuido significativamente desde la década de 1960, mientras que el sistema arancelario permanece anclado en un paradigma de la posguerra. Miran argumenta que el arancel efectivo de Estados Unidos sobre las importaciones es el más bajo del mundo, situándose en un 3%, en comparación con el 5% de la Unión Europea y el 10% de China.

¿Son justos los aranceles de Trump?
La imposición de aranceles generales del 25% por parte de la administración Trump a los automóviles ha generado controversia. Jason Cummins, economista jefe para Estados Unidos de Brevan Howard, argumenta que este arancel podría estar justificado para abordar las diferencias inherentes entre los sistemas arancelarios y el Impuesto al Valor Agregado (IVA) entre Estados Unidos y Europa.
«Un posible arancel estadounidense de 25 por ciento sobre los bienes que provienen de Europa no es arbitrario, punitivo ni simplemente una táctica de negociación», escribe Cummins.
El impacto en las cadenas de suministro y la opinión pública
A pesar de estos argumentos, la imposición de aranceles podría tener consecuencias negativas para las complejas cadenas de suministro, generando inflación y afectando a diversas industrias. Sin embargo, Foroohar sugiere que las cadenas de suministro podrían volverse más integradas verticalmente en el futuro, impulsadas por factores como la fabricación aditiva y la necesidad de reducir la huella de carbono.
La autora plantea que si se presentaran los aranceles efectivos de Estados Unidos, la Unión Europea y China a los estadounidenses y se les preguntara si les parece justo, la respuesta probablemente sería negativa. Sin embargo, reconoce que las opiniones sobre los aranceles dependen en gran medida de cómo se formule la pregunta.
La perspectiva europea y el proteccionismo
Tej Parikh, editorialista de economía de Financial Times, ofrece una perspectiva europea sobre el tema. Parikh señala que el apoyo a los aranceles puede variar dependiendo del elemento que se enfatice, tanto en Estados Unidos como en Europa. Las personas pueden tener dificultades para evaluar el costo directo de los aranceles de importación en relación con la importancia que le dan a la equidad.
Aranceles como herramienta política
Parikh argumenta que los aranceles comerciales pueden ser una herramienta política útil, ya que su justificación puede ser dirigida selectivamente. En el Reino Unido, por ejemplo, controlar la inmigración ha sido un aspecto más destacado de la globalización que proteger ciertos empleos e industrias con aranceles. Sin embargo, Parikh imagina que aún se puede obtener apoyo para los aranceles de importación en áreas que han experimentado una rápida desindustrialización.
- Zonas costeras, rurales y del norte de Inglaterra: Los aranceles pueden ayudar a bloquear la competencia barata del extranjero, proteger los empleos y fomentar las industrias.
- Londres: Es improbable que se encuentre apoyo a los aranceles, dado el auge económico que ha experimentado la ciudad, en parte debido a la globalización.
Conclusión
El debate sobre los aranceles en Estados Unidos y Europa está lejos de ser simple. Las opiniones están divididas, y el apoyo depende de una variedad de factores, incluyendo la percepción de justicia, el impacto en los precios y las circunstancias económicas locales. A medida que la administración Trump continúa explorando opciones comerciales, es crucial comprender las complejidades de este debate y considerar las posibles consecuencias para todas las partes involucradas.