Los contribuyentes de menores ingresos en España pagan un 6,7% en impuestos, muy por debajo de la media comunitaria del 19%, según datos de Eurostat.

Tributación del salario mínimo en España

La decisión del Ministerio de Hacienda de no adaptar el IRPF a la nueva subida del salario mínimo interprofesional (SMI) ha generado controversia y fuertes críticas de distintos partidos políticos.

Los socios minoritarios del Gobierno, como Sumar, Podemos y ERC, junto con otras formaciones como Bildu y BNG, rechazan la propuesta de Hacienda y piden que se revierta.

El PP también se ha manifestado en contra, solicitando una actualización del mínimo exento del impuesto para que la subida del SMI no afecte a los perceptores.

En cambio, Hacienda defiende que en los últimos años se han aprobado rebajas fiscales para las rentas bajas y medias, lo que ha permitido que el SMI no tributara.

Sin embargo, Hacienda considera que, ahora que el SMI se sitúa en torno al 60% del salario medio neto, debe empezar a tributar para contribuir a sostener las cuentas públicas.

Comparación europea

Según Eurostat, España tiene una de las tasas impositivas más bajas sobre las rentas bajas a nivel europeo, solo similar a la de Estonia.

En concreto, una persona soltera y sin hijos con un salario equivalente al 50% del sueldo medio bruto anual en 2023 destinó solo el 6,69% de su retribución al pago de impuestos.

Esta cifra contrasta con la media europea del 19,03% y con los datos de países como Alemania (28,8%), Portugal (20,6%), Francia (13,8%) o Italia (11,3%).

Según el informe "Salarios mínimos en 2024: Revisión anual" de Eurofound, España también se sitúa entre los países con menor carga tributaria sobre las rentas inferiores.

Implicaciones de la subida del SMI

Hacienda estima que la gran mayoría de los perceptores del SMI (cerca del 80%) seguirán exentos del pago del IRPF debido a las deducciones familiares.

Sin embargo, la otra parte del Gobierno de coalición y otros socios consideran que las rentas más bajas deben ser priorizadas y que no se puede incluirlas en el IRPF justo después de las recientes rebajas fiscales a los arrendadores.

Según Hacienda, las rebajas para las rentas bajas y las exenciones para los perceptores del SMI compensarán el aumento de la carga fiscal.

Además, Hacienda recuerda que un soltero sin hijos que perciba el nuevo salario mínimo pagará 300 euros en retenciones, frente a los 1.324 euros que pagaría con el esquema del Gobierno anterior en 2018.