Las multinacionales españolas se acogen a las ventajas fiscales de paraísos fiscales como Malta, Irlanda, Países Bajos, y Luxemburgo para deslocalizar sus beneficios y así mejorar su productividad aparente, según se desprende del último Informe País por País (Country by Country Report o CbC, por sus siglas en inglés) publicado por la Agencia Tributaria. Este fenómeno, conocido como "desviación de beneficios" o prácticas BEPS, ha sido denunciado por expertos y organismos internacionales como la OCDE, que están trabajando para implementar medidas para frenarlo.
El desvío de beneficios, una práctica generalizada
Los expertos consultados coinciden en que este fenómeno no se circunscribe únicamente a las multinacionales españolas, sino que es una práctica generalizada a nivel global. Las empresas aprovechan las diferencias en las legislaciones fiscales de los distintos países para reducir su carga impositiva, trasladando sus beneficios a territorios con tipos impositivos más bajos.
Los paraísos fiscales, un imán para las multinacionales
Malta, Irlanda, Países Bajos y Luxemburgo son algunos de los destinos más populares para las multinacionales que buscan optimizar su fiscalidad. Estos países ofrecen ventajas fiscales como tipos impositivos reducidos, exenciones y deducciones, que atraen a las empresas que buscan minimizar sus obligaciones tributarias.
La productividad aparente, un espejismo
El Informe País por País revela que la productividad por trabajador en las filiales de las multinacionales españolas en estos paraísos fiscales es notablemente más alta que en el resto de países. Sin embargo, esta productividad aparente es engañosa, ya que se debe principalmente a la deslocalización de beneficios y no a una mayor eficiencia o productividad real.
En estos territorios, las multinacionales suelen tener un número reducido de empleados, ya que no son centros productivos en sí mismos, sino que sirven como vehículos para canalizar los beneficios. Esta situación distorsiona el indicador de productividad, ya que el resultado de dividir los ingresos totales entre el número de asalariados arroja una ratio elevada.
Medidas para frenar las prácticas BEPS
La OCDE y la Unión Europea están trabajando en la implementación de medidas para frenar las prácticas de desviación de beneficios. Entre estas medidas se encuentran el Pilar 1, que busca gravar a las multinacionales en función de su facturación en cada país, y el Pilar 2, que establece un tipo mínimo de impuesto de sociedades.
La colaboración internacional, clave para combatir el fraude fiscal
La lucha contra el fraude fiscal requiere una colaboración internacional estrecha. Los países deben trabajar juntos para compartir información, coordinar investigaciones y cerrar los vacíos legales que permiten a las multinacionales eludir sus obligaciones tributarias. Solo a través de una acción conjunta se podrá garantizar un sistema fiscal justo y equitativo.