El León de Bélgica ruge contra las franquicias
En Bélgica, la decisión de la multinacional holandesa Ahold Delhaize de franquiciar sus 128 supermercados se ha convertido en un importante conflicto laboral.
El conflicto
Los trabajadores de los supermercados Delhaize protestan contra la decisión de la empresa, alegando que la medida provocará pérdidas de empleo, reducción de las condiciones de trabajo y salarios, aumento de los contratos precarios y desaparición de los derechos de los trabajadores a organizarse colectivamente.
Según los sindicatos, los sueldos podrían reducirse hasta un 30% y el número de trabajadores por tienda podría disminuir de 75 a 25.
La empresa, por su parte, afirma que la medida no tendrá ningún impacto en el empleo y que su objetivo es estimular el crecimiento.
Las protestas
El conflicto ha derivado en huelgas, protestas y cierres de tiendas. La tensión ha llegado a los tribunales, con la empresa pidiendo a los jueces que limiten los piquetes y prohíban los bloqueos en las puertas de los supermercados.
Los sindicatos condenan la decisión judicial, alegando que favorece los intereses económicos de la empresa en detrimento de los derechos de los trabajadores.
El futuro del conflicto
La próxima reunión entre la empresa y los sindicatos está prevista para el día siguiente a una nueva huelga y manifestación convocadas para el 22 de mayo. hasta entonces, no parece que haya posibilidades de arreglo.
El conflicto pone de manifiesto la creciente tensión entre las empresas y los trabajadores en Bélgica, donde los sindicatos tienen una fuerte tradición.
"El objetivo de la huelga es establecer un equilibrio de poder para llevar a la dirección a negociar", ha declarado Myriam Djegham, una de las líderes de la protesta.
"Es muy preocupante que la justicia tome partido en el conflicto, optando por favorecer los intereses económicos de la empresa", ha añadido.
