Guerra de Embajadas: ¿Un conflicto comercial en ciernes?
La relación comercial entre México, Estados Unidos y China está experimentando una creciente tensión, evidenciada por un intercambio de declaraciones y acciones diplomáticas. El centro de la disputa son las plataformas de comercio electrónico chinas como Shein, Temu y AliExpress, que se están volviendo cada vez más populares entre los consumidores mexicanos.

La petición de Estados Unidos y la respuesta de China
Según un reporte de El Financiero, la Embajada de Estados Unidos en México está impulsando una campaña para que los usuarios digitales eliminen estas aplicaciones de sus dispositivos móviles. La justificación, según la embajada estadounidense, es que estas plataformas están afectando directamente a las industrias mexicanas y se dedican al robo de datos. En respuesta, la Embajada de China ha calificado estas acciones como «prácticas hegemónicas», argumentando que las políticas comerciales de Estados Unidos, como los aranceles recíprocos y los impuestos a productos mexicanos, son las que realmente dañan la industria local y desprecian los intereses de los ciudadanos.
Andrés Díaz Bedolla, fundador de Yumari, una plataforma que conecta empresas latinoamericanas con compradores internacionales, en un video publicado por la Embajada de Estados Unidos (posteriormente eliminado), afirmó que estas aplicaciones enfrentan demandas en Estados Unidos por robo de datos y por su presunta intención de acabar con el comercio local para eliminar la competencia. «Simplemente, porque cada vez que compras tú en una plataforma que está dispuesta a perder 30 dólares por cada transacción en América Latina, solamente con el objetivo de disrumpir y matar por completo a las industrias locales que podrían competir contra ellos», comentó Díaz Bedolla.

Las medidas tomadas por México
El gobierno mexicano ya está tomando medidas para regular a estas plataformas de comercio electrónico. A principios de enero de 2025, se implementaron regulaciones fiscales que obligan a estas empresas a pagar impuestos. Además, se impuso un arancel del 19 por ciento para productos de países con los que México no tiene tratados de libre comercio, incluyendo China, y un arancel del 35 por ciento para todos los textiles. Según El Financiero, estas medidas buscan proteger a la industria textil mexicana, que ha sufrido pérdidas significativas en los últimos años.
También se requiere que los usuarios proporcionen datos como el CURP o el RFC al momento de realizar cada compra, para cumplir con las normativas fiscales y aduaneras. Adicionalmente, las autoridades mexicanas han limitado a diez el número de envíos mensuales por destinatario para compras realizadas en estas plataformas.
Impacto en la industria textil mexicana
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, declaró que estas aplicaciones digitales contribuyeron al cierre de múltiples empresas del sector textil. «Son estas plataformas donde uno pide cualquier producto. Una cosa es la llegada individual de una pieza, pero lo que detectamos es que se estaban utilizando para traer y después vender en México, y eso requiere pagar impuestos», explicó Sheinbaum.
De acuerdo con datos de la Cámara Nacional de la Industria Textil (CANAINTEX), el sector presentaba pérdidas anuales de más de 3,200 millones de dólares debido al ingreso masivo de productos importados. Se estima que estas aplicaciones comerciales provocaron una disminución del 8 por ciento en la producción nacional de la industria textil durante 2024 y la pérdida de más de 20 mil empleos en el sector.
Implicaciones y futuro de la relación comercial
La controversia actual plantea interrogantes sobre el futuro de la relación comercial entre México, Estados Unidos y China. Si bien las medidas tomadas por México buscan proteger su industria local, también podrían interpretarse como una restricción al comercio electrónico y un obstáculo para el acceso de los consumidores a productos a precios competitivos.
Es crucial observar cómo se desarrolla esta situación y si se llega a un acuerdo que beneficie a todas las partes involucradas. La diplomacia y la negociación serán clave para evitar un escalamiento del conflicto y garantizar un comercio justo y equitativo.
Posibles escenarios:
- Acuerdo trilateral: México, Estados Unidos y China podrían llegar a un acuerdo que regule el comercio electrónico y proteja los intereses de cada país.
- Escalada de tensiones: La falta de diálogo podría llevar a la imposición de más aranceles y restricciones comerciales.
- Mayor regulación: México podría endurecer aún más las regulaciones para las plataformas de comercio electrónico chinas.
El tiempo dirá cómo se resolverá esta «guerra de embajadas», pero lo que está claro es que el futuro del comercio electrónico y las relaciones comerciales internacionales están en juego.