Puig celebra su entrada en el Ibex 35
La compañía catalana Puig se encuentra de enhorabuena. En apenas dos meses de cotización ha logrado entrar a formar parte del Ibex 35, sustituyendo a Meliá a partir del próximo 22 de julio.
Un hito esperado
Pese a que Puig ya contaba con los requisitos necesarios de liquidez y capitalización para formar parte del selectivo nacional en la reunión de junio, el comité asesor técnico decidió posponer la decisión y esperar a que la empresa cumpliera dos meses como cotizada.
Esta noticia es un gran paso para Puig, ya que la entrada en el Ibex 35 la sitúa en el punto de mira de los fondos que replican el comportamiento del índice.
Sólidas perspectivas de futuro
Puig cuenta con todos los elementos necesarios para mantener un buen desempeño a largo plazo. Actualmente cotiza a un múltiplo exigente, pero los analistas confían en que seguirá generando valor para los accionistas.
Se espera que Puig crezca por encima de su sector gracias a su enfoque en el segmento premium, que se prevé que experimente un mayor crecimiento en los próximos años. Además, su segmento de maquillaje ha registrado un crecimiento de dos dígitos debido a la adquisición de Charlotte Tilbury en 2020.
Respaldo de los analistas
Diversas casas de análisis han mostrado recientemente su apoyo a Puig. Por ejemplo, Goldman Sachs prevé que las ventas del grupo de cosmética y perfumería aumenten un 11% en los próximos tres años, superando las previsiones de la propia compañía.
Los analistas creen que la evolución de Puig en bolsa será positiva a medio y largo plazo, ya que cuenta con una buena diversificación geográfica, es una empresa familiar con buenos márgenes y tiene una directiva centrada en generar valor para los accionistas.
Análisis técnico
El corto recorrido de Puig en bolsa obliga a analizar el gráfico de las últimas semanas. Las últimas noticias han provocado un impulso alcista en el valor, rompiendo la tendencia de mínimos y máximos decrecientes.
El objetivo más realista de precio es la vuelta a niveles cercanos a los 28 euros por acción. Sin embargo, la pérdida de los 25 euros sería más preocupante, ya que ha demostrado ser un nivel de soporte importante en los dos meses de cotización.