El desempleo en Canadá alcanza un máximo de 26 meses
En un reciente giro económico, Canadá ha informado sobre la pérdida neta de 2,200 empleos durante el mes de marzo, un dato que ha impactado significativamente las expectativas del mercado laboral canadiense. Diversas fuentes, incluida la agencia de noticias Canadian Press y la entidad nacional de estadística, Statistics Canada, han confirmado que la tasa de desempleo ha ascendido a un nuevo pico de 26 meses, situándose en el 6.1%. Esta situación ha llevado a que los operadores de mercados monetarios aumenten sus pronósticos acerca de un posible recorte de las tasas de interés por parte del Banco de Canadá a partir de junio.
Comparativamente, antes de la pandemia de COVID-19, una tasa de desempleo tan elevada no se había presenciado desde el 6.1% registrado en agosto de 2022, resaltando el contraste con la situación económica previa a la pandemia. El informe de empleo de marzo, que se ha convertido en el último gran indicador antes del próximo anuncio de tasas de interés del Banco de Canadá, sugiere que las posibilidades de un recorte inminente no se pueden descartar totalmente.
Reacciones del mercado y perspectivas económicas
Los mercados, reajustando sus perspectivas, ahora contemplan aproximadamente un 20% de probabilidad de un recorte para la próxima semana, con un incremento hasta el 64% para junio. A pesar de las expectativas moderadas, los bonos gubernamentales canadienses han mostrado un incremento en sus rendimientos esta mañana, en respuesta a la publicación de datos del mercado laboral en EE.UU. más fuertes de lo anticipado.
La reacción en los mercados de divisas frente a la combinación de débiles cifras canadienses y fuertes estadísticas estadounidenses fue aún más evidente. El dólar canadiense perdió casi medio centavo frente al dólar estadounidense, cotizando a 73.32 centavos de dólar estadounidense después de los informes sobre empleo.
Análisis de expertos y efecto en las políticas monetarias
Economistas como Olivia Cross y David Rosenberg han expresado que el incremento en la tasa de desempleo y la evidencia de una disminución en la presión sobre los salarios podrían precipitar una sorpresiva reducción de las tasas de interés por parte del Banco de Canadá. Además, la combinación de una disminución en el empleo y la presión constante de los salarios coloca a la institución financiera en una posición delicada, donde se deben equilibrar las políticas monetarias con la realidad económica de Canadá.
El mercado laboral muestra signos de alivio, y si bien no ha colapsado, un aumento en la tasa de desempleo y señales de que las presiones inflacionarias están disminuyendo, refuerzan la suposición de que el banco central se inclinará hacia una reducción de las tasas de interés. Las expectativas de crecimiento del PIB, combinadas con este nuevo enfoque, han dejado la puerta abierta para una postura más acomodaticia por parte del Banco de Canadá.
