La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha instado este lunes en el foro CREO, organizado por CincoDías, a "modernizar" el sector secundario para "volver a ser el centro industrial que fue". Para ello, ha dicho, "debe afianzar su autonomía estratégica que permita reequilibrar la globalización de las últimas décadas con una economía de proximidad que nos reduzca dependencias y nos siga convirtiendo en destino de inversión". Todo, en un entorno de enorme competencia con el resto de "grandes gigantes", sobre todo en Asia y América.

El contexto de desafíos y la respuesta europea

Ribera ha reconocido el "contexto de desafíos" en el que se mueve Europa y que exige "encontrar la mejor respuesta, en especial para proteger a los colectivos que puedan sentirse más amenazados". A las puertas de las elecciones europeas, en las que será cabeza de cartel socialista y —muy probablemente— también comisaria en el próximo Ejecutivo comunitario, ha afirmado que "la dimensión comunitaria cobra un especial valor". "Es un proyecto de éxito y un referente faro de democracia y prosperidad en un momento en el que el mundo vive una etapa convulsa, como nunca en mucho tiempo. Por eso es particularmente importante afianzar y hacer crecer los valores constitutivos de la UE", ha agregado.

La coyuntura no podría ser más desafiante, con dos revoluciones en marcha: la digital y la ecológica, y con la energía "convertida en sistémica para la economía" y en un gran baluarte que "puede recortar la desigualdad y crear oportunidades". "Europa no ganará la batalla restando derechos laborales ni buscando una mayor productividad mediante el recorte de las condiciones de vida. Al contrario: gana alimentando un círculo virtuoso en el conjunto de la sociedad forma parte de esta manera de seguir construyendo Europa", ha subrayado.

España, preparada para aprovechar las nuevas oportunidades

Para poder extraer lo mejor en este nuevo entorno, a juicio de Ribera, los referentes clave deben ser la "estabilidad, la regulación coherente y la predictibilidad de las políticas que se toman en la UE". Si un país puede verse particularmente beneficiado por este nuevo ecosistema, en el que la energía verde y barata juega un papel esencial, ese parece ser España. "Frente a la maldición que nos recordaba Manuel Azaña [presidente de la Segunda República], cuando decía que los acontecimientos de los últimos 200 años nos habían pillado siempre desprevenidos, ahora no es así: nos pilla en perfecto estado de revista y con una gran capacidad de aprovechar las oportunidades", ha afirmado Ribera. "Y esto no ha hecho más que empezar".

España, ha dicho, enfrenta estos cambios en "condiciones óptimas, con el valor añadido de unos trabajadores enormemente cualificados, y unas ciudades y unos entornos rurales preparados para este cambio en la forma de generar valor. Y con una banca en condiciones de aportar el puente entre lo que somos hoy y lo que queremos ser mañana. Y una estabilidad y predictibilidad". Por ello, ha añadido la vicepresidenta, "las políticas que adoptemos estos años van a ser determinantes para la viabilidad de nuestro país y del futuro del empleo. De la capacidad de producir valor en un entorno de cooperación o caer en el conflicto y la desesperanza".

La energía barata, un atractivo para la inversión

El mercado eléctrico español lleva meses arrojando precios más bajos que los del resto de la UE. "Esto es una gran oportunidad industrial y de servicios. Son señales idóneas para otra realidad: España se reindustrializa, empieza a revertir la pérdida de tejido empresarial, y se convierte en un lugar atractivo". Esa disponibilidad de energía "asequible y limpia", ha rematado Ribera, "está siendo ya una fuente atractiva de inversión: diamantes sintéticos, baterías, electrolizadores, hidrógeno o fábricas de bienes de equipo".

  • Teresa Ribera ha instado a "modernizar" el sector secundario para "volver a ser el centro industrial que fue".
  • España afronta estos cambios en "condiciones óptimas" y con una "gran capacidad de aprovechar las oportunidades".
  • La energía verde y barata está siendo un atractivo para la inversión en España.