El PNV se adjudica el palacete de la discordia
El Partido Nacionalista Vasco (PNV) ha reclamado durante años la propiedad del palacete ubicado en el número 11 de la avenida Marceau de París, cerca de los Campos Elíseos, que actualmente alberga la sede del Instituto Cervantes en la capital francesa.
Un edificio con historia
El inmueble fue adquirido en 1936 por el Gobierno vasco en el exilio y sirvió como su sede hasta 1940, cuando fue ocupado por la Gestapo durante la Segunda Guerra Mundial. Después de la guerra, el edificio pasó a manos del Estado español y se convirtió en la Biblioteca Española. En 1991, con la fundación del Instituto Cervantes, el palacete se integró a su red de bibliotecas y en 2006 fue rebautizado como Octavio Paz.
Reclamación del PNV
El PNV ha mantenido durante décadas que el edificio es de su propiedad, basándose en estudios históricos que afirman que fue adquirido con fondos de militantes del partido recibidos desde México y Cuba. El partido ha llevado su reclamación a los tribunales, pero en 2003 el Tribunal Supremo falló en su contra, argumentando que el edificio fue integrado al Patrimonio del Estado español mediante una sentencia judicial.
Restitución del edificio
En diciembre de 2022, el Gobierno español aprobó un decreto-ley que incluía la restitución del palacete al PNV, pero este decreto fue anulado en el Congreso de los Diputados. Sin embargo, el PNV asegura que el edificio ya está en sus manos y que no volverá a perderlo.
Reacciones
La restitución del palacete ha generado reacciones encontradas. El PP ha acusado al Gobierno de "regalar" edificios públicos al PNV sin cumplir los requisitos legales, mientras que el PNV ha defendido la legitimidad de su reclamación.
Futuro del edificio
El futuro del palacete es incierto. El PNV ha anunciado que no tiene intención de venderlo, pero no está claro qué uso le dará. Se espera que el partido negocie con el Gobierno español para encontrar una solución que satisfaga a ambas partes.
Mikel Ormazabal, El País