El virus de la gripe aviar H5N1 continúa propagándose entre mamíferos, lo que genera preocupación por el riesgo que corren los trabajadores lácteos y la posibilidad de una pandemia entre humanos.
Trabajadores lácteos en riesgo
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos advierten que los trabajadores lácteos siguen expuestos al virus, que está infectando a las cabañas lecheras. El virus puede transmitirse a través del contacto con aves enfermas, ganado, heces, leche cruda o superficies contaminadas.
Los trabajadores deben usar equipo de protección adecuado, como guantes, mascarillas y batas, cuando manipulen animales o productos animales. También es importante lavarse las manos con frecuencia y evitar tocarse la cara.
Propagación entre mamíferos
El virus H5N1 se ha propagado a diversas especies de mamíferos, incluidas morsas, osos polares y focas. Este contagio es inusual y preocupa a los expertos, ya que podría facilitar la transmisión entre humanos.
En el archipiélago noruego de Svalbard, se encontró muerta una morsa a causa de la gripe aviar. También se han registrado casos en osos polares en Alaska y miles de muertes de mamíferos marinos en Suramérica.
Posible pandemia
La propagación del virus entre mamíferos aumenta el riesgo de que se adapte a los humanos y provoque una pandemia. Si el virus se vuelve altamente contagioso entre las personas, podría tener consecuencias devastadoras.
Los expertos recomiendan la vigilancia continua, la investigación y las medidas de control para prevenir una posible pandemia. Es esencial que los trabajadores lácteos y el público en general tomen precauciones para protegerse del virus y reducir el riesgo de transmisión.