Romina Mircoli asegura haber cumplido la última voluntad de su madre, Dulce
Romina Mircoli, hija de la fallecida cantante Dulce, ha concedido una entrevista exclusiva a 'Ventaneando', en la que ha explicado los motivos por los que no hubo funeral para despedir a su madre y ha respondido a las críticas que ha recibido por no haber cumplido su última voluntad.
Los últimos días de Dulce
Romina ha contado que cuando a su madre le realizaron los primeros estudios, los resultados salieron negativos para cáncer. Sin embargo, en la operación que le practicaron posteriormente, los médicos encontraron un tumor muy grande fuera del pulmón.
Tras varios exámenes, los médicos descubrieron que había metástasis en el cuerpo de Dulce. "Por dentro no se veía, estábamos bien contentos de que no había cáncer, a la mera hora se descubre que hay ese tema de la metástasis muy avanzada", ha señalado Romina.
La última voluntad de Dulce
Romina también ha explicado que su madre le pidió que no quería ser vista con los efectos de la enfermedad que le arrebató la vida. "Ella me dijo 'Romi yo no quiero que nadie me vea así' y le dije 'no mami no te preocupes, nadie te va a ver' y me volvió a insistir 'Romi que nadie me vea así, tú elige la urna más preciosa y llévame a la Basílica por favor, una urna que brille'"
Romina ha añadido que su madre quería que sus cenizas fueran llevadas a la Basílica de Guadalupe y que había pedido ser enterrada junto a su madre, pero que cambió de opinión debido al deterioro de su salud.
Respuesta a las críticas
Romina ha respondido a las críticas que ha recibido por no haber realizado un funeral para su madre. "Mi mamá toda la vida expresó que quería ser enterrada junto a su mamá, pero eso lo dices cuando piensas que vas a morir de viejito, pero en este caso el cáncer deterioró muchísimo a mi mamá", ha dicho.
La hija de Dulce ha explicado que su madre terminó muy reducida físicamente y que sus placeres estaban limitados. "La vida prácticamente le había quitado todo", ha afirmado.
Romina ha concluido diciendo que cumplió la última voluntad de su madre y que la recuerda como una persona alegre y feliz que siempre estaba sonriendo.
"Mi mamá siempre decía que quería vivir hasta los 100 años, pero la vida le tenía otros planes", ha dicho Romina con la voz entrecortada.