Romina Mircoli, hija de Dulce, rompe el silencio tras el fallecimiento de su madre

El mundo artístico mexicano está de luto tras el fallecimiento de Bertha Elisa Noeggerath Cárdenas, conocida artísticamente como Dulce, el pasado 25 de diciembre. La intérprete de música romántica perdió la batalla contra el cáncer de pulmón a los 69 años.

La noticia impactó a sus seguidores y colegas, pero también puso en el foco las decisiones de su hija, Romina Mircoli, respecto al manejo de la despedida de su madre.

Romina rompe el silencio

Romina, única hija de Dulce, había mantenido un perfil bajo durante la hospitalización de su madre. Sin embargo, el 27 de diciembre rompió el silencio con un emotivo mensaje en su cuenta de Instagram.

"No tengo en mi corazón más que agradecimiento a Dios, no pude haber tenido mejor mamá", escribió Romina. "Tú me creaste y vivirás en mí, como vivirás a través de mi hijo, que tiene tus mismos ojitos".

Discreción en la despedida

Una de las decisiones que llamó la atención fue la de no realizar un funeral tradicional. Guillermo Rebolledo, expareja sentimental de Dulce, señaló que ningún familiar estuvo presente en la funeraria. Según Rebolledo, la familia mantuvo discreción sobre los detalles del proceso.

El programa de televisión "Ventaneando" confirmó que los restos de Dulce fueron cremados y resguardados en una funeraria mientras se organizaban los planes para una despedida pública.

Misa de homenaje

Finalmente, se anunció que se llevará a cabo una misa en la Basílica de Guadalupe, donde amigos, familiares y seguidores podrán rendirle homenaje a la fallecida cantante.

El legado de Dulce

La partida de Dulce marca el fin de una trayectoria que dejó huella en la música romántica mexicana. Su voz y canciones seguirán siendo recordadas por su público.

Aunque su hija ha optado por mantenerse alejada de los reflectores, su mensaje en redes sociales muestra el impacto emocional de la pérdida y su profundo vínculo con su madre.