Beneficios y efectos del aceite de lavanda en el cabello


El aceite esencial de lavanda es popularmente conocido por sus múltiples propiedades terapéuticas. En el ámbito capilar, se le atribuyen diversos beneficios, como su posible eficacia para contrarrestar la caída del cabello y la calvicie. Un estudio realizado en 2016 sugiere que la aplicación de aceite de lavanda podría incrementar el grosor y la velocidad de crecimiento del cabello en determinadas personas.

Además, el aceite de lavanda posee propiedades antifúngicas y antimicrobianas, lo que lo convierte en un posible aliado en el combate de la caspa. Al reducir la presencia de hongos, puede aliviar síntomas como la comezón y ayudar a erradicar la afección. Un estudio de 2011 también indica que el aceite de lavanda podría ayudar a prevenir y eliminar los piojos, aunque se destaca que no debe reemplazar los tratamientos médicos específicos para dicha infección.

Otro de los beneficios atribuidos al aceite de lavanda para el cabello es su efecto hidratante. Sus componentes naturales podrían ayudar a calmar la irritación y la picazón del cuero cabelludo. También se le reconoce su propiedad relajante, ya que la inhalación de su aroma ha demostrado reducir el estrés y mejorar el estado de ánimo.

Al igual que con cualquier producto aplicado sobre el cabello, el aceite de lavanda puede provocar efectos secundarios. Uno de los más comunes es la alergia. Para minimizar posibles reacciones adversas, se recomienda realizar una prueba de parche antes de su uso generalizado.

Para aprovechar los posibles beneficios del aceite de lavanda en el cabello, se aconseja aplicarlo de la siguiente manera:

  1. Mezclar unas gotas de aceite de lavanda con un aceite portador, como el aceite de jojoba o de coco.
  2. Aplicar la mezcla sobre el cuero cabelludo y masajear suavemente.
  3. Dejar actuar durante 30 minutos o más.
  4. Enjuagar con agua tibia y lavar el cabello como de costumbre.

Se recomienda utilizar el aceite de lavanda para el cabello con moderación y suspender su uso si se experimenta alguna reacción adversa.

(Fuentes: Healthline, Instituto Nacional del Cáncer, Redacción El Financiero)