Betzabeth Martínez Gutiérrez, originaria de Santiago Matatlán, Oaxaca, México, se convirtió en la primera mujer zapoteca en formar parte de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP27). Estudiante de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Betzabeth se unió a un selecto grupo de 11 jóvenes latinoamericanos para representar a la región en este importante evento.
Una voz indígena en el escenario mundial
La participación de Betzabeth en la COP27 marcó un hito para la representación de los pueblos indígenas en las discusiones sobre cambio climático. Como miembro del equipo de observadores, tuvo la oportunidad de presenciar y contribuir a las negociaciones sobre la nueva meta colectiva para el financiamiento del calentamiento global. También pronunció un discurso sobre justicia climática y los derechos de los pueblos indígenas, destacando sus propias experiencias en su comunidad.
El impacto del cambio climático en las comunidades indígenas
En su discurso, Betzabeth enfatizó las graves consecuencias del cambio climático en las comunidades indígenas. Señaló que las mujeres indígenas, en particular, son desproporcionadamente afectadas debido a su estrecha conexión con la naturaleza y su papel tradicional como guardianas del medio ambiente. Las sequías, las tormentas y otros eventos climáticos extremos están poniendo en peligro sus medios de vida, su salud y su cultura.
- Las parteras y curanderas indígenas enfrentan dificultades para cultivar plantas medicinales debido a los cambios en los patrones climáticos.
- Las mujeres agricultoras están sufriendo pérdidas de cosechas y escasez de agua, lo que amenaza su seguridad alimentaria.
- La producción de mezcal, una importante fuente de ingresos para las comunidades zapotecas, se ve afectada por la escasez de agave y las sequías.
Liderazgo indígena en la mitigación del cambio climático
Pese a los desafíos, Betzabeth también destacó el papel de liderazgo que desempeñan las mujeres indígenas en la mitigación del cambio climático. Explicó que las mujeres han estado conservando los ecosistemas y protegiendo los recursos naturales de manera tradicional. Al compartir su sabiduría y experiencia, pueden contribuir a la creación de soluciones sostenibles al cambio climático.
Un llamado a la acción
La participación de Betzabeth en la COP27 no solo fue un testimonio de su dedicación al activismo ambiental, sino también un llamado a la acción. Instó a los líderes mundiales a reconocer y abordar los impactos desproporcionados del cambio climático en las comunidades indígenas. También destacó la importancia de incluir las voces indígenas en la toma de decisiones y garantizar su participación significativa en los esfuerzos de mitigación y adaptación.
“Nuestro futuro depende de la salud de nuestro planeta”, dijo Betzabeth. “Es esencial que todos trabajemos juntos, incluidos los pueblos indígenas, para proteger nuestro hogar común y asegurar un futuro sostenible para las generaciones venideras”.