La aproximación de las elecciones catalanas ha propiciado el surgimiento de candidaturas de perfil ultra e identitario, derivadas de las recientes tensiones dentro del movimiento independentista. El partido de extrema derecha Alianza Catalana ha logrado los avales necesarios para presentarse a las elecciones del próximo 12 de mayo, según anunció este domingo. Esta formación, liderada por la alcaldesa de Ripoll (Gerona), Sílvia Orriols, basa su discurso en la oposición a la inmigración y al islamismo, bajo el lema "Salvemos Cataluña". Asimismo, Alhora, plataforma liderada por la exconsejera Clara Ponsatí y el filósofo Jordi Graupera, también ha conseguido los avales requeridos, mientras que Solidaridad Catalana se ha quedado fuera al obtener únicamente 3.543 apoyos.

Pugna por el liderazgo independentista

Ponsatí, quien fuera consejera de Educación durante el gobierno de Carles Puigdemont, presenta su candidatura defendiendo que el único independentismo viable es el que se opone abiertamente al gobierno central. Esta postura ha generado dudas sobre las posibles consecuencias para Junts, el partido de Puigdemont, a quien acusa de querer implementar una política más moderada con el Estado español. Por otro lado, la líder de Alianza Catalana, Sílvia Orriols, tacha a Junts de copiar su discurso y a Vox de imitar sus consignas. Sus tesis contra la inmigración constituyen el principal eje de su irrupción en la campaña electoral.

El papel de Esquerra Republicana

Esquerra Republicana (ERC), a través de su portavoz Raquel Sans, ha manifestado tajantemente que no pactará con formaciones de extrema derecha, independientemente de su ideología independentista o no. Esto se debe al temor que Alianza Catalana pueda obtener representación en el Parlamento catalán, ya que, según algunas encuestas internas, podría superar a Junts. El auge de esta corriente antiinmigración podría beneficiarse de una alta abstención.

Posición del entorno de Puigdemont

El entorno de Carles Puigdemont ha expresado que no aceptará lecciones de nadie en cuanto a pactos con formaciones de extrema derecha. Respecto a la irrupción de Alhora, consideran que Clara Ponsatí no obtendrá escaño y que su entrada en escena podría atraer a votantes descontentos con Puigdemont o incluso a un sector del electorado de la CUP.