La tauromaquia en la Ciudad de México: Un capítulo controvertido llega a su fin
En un giro inesperado, la Ciudad de México se encuentra prohibiendo las corridas de toros con violencia, marcando un antes y un después en la tradición taurina de la capital. Este consenso político, según reporta Domínguez (2024) en Milenio, se gestó tras años de debates y controversias. La decisión no solo está generando reacciones encontradas entre defensores y detractores de la tauromaquia, sino que también plantea interrogantes sobre el futuro de esta práctica en el país.

Un consenso político inusual
Las fuerzas políticas de la Ciudad de México, tradicionalmente divididas en múltiples temas, están mostrando una sorprendente unidad al abordar la prohibición de las corridas de toros con violencia. «Hoy no jugaron a las vencidas. La pelea fue para colgarse la medalla», se comenta en el artículo de Milenio, reflejando la competencia entre los partidos por capitalizar políticamente esta decisión (Domínguez, 2024). Este consenso, sin embargo, no está exento de matices y tensiones internas, como se evidenció con el voto en contra del diputado morenista Pedro Haces, un ferviente defensor de la tauromaquia.

El debate legislativo: 16 años de intentos fallidos
La prohibición actual es el resultado de 16 años de intentos legislativos para regular o eliminar las corridas de toros en la Ciudad de México. Según Milenio (Domínguez, 2024), se presentaron 20 iniciativas en la entonces Asamblea Legislativa del DF sin lograr prosperar. El punto de inflexión llegó con la propuesta de prohibir las corridas tradicionales, permitiendo únicamente el toreo sin causar daño al toro. Esta medida, aunque celebrada por muchos, no satisface completamente a ninguno de los bandos.

¿El principio del fin de la tauromaquia?
Jesús Sesma, diputado del Partido Verde, está exclamando: «No tengan duda, que este es el principio del fin de la tauromaquia y del maltrato animal en la Ciudad de México». Esta declaración, según lo publicado por Grupo Milenio (Domínguez, 2024), está reflejando la esperanza de los defensores de los derechos de los animales, quienes ven en esta prohibición un paso crucial hacia la erradicación del maltrato animal en los espectáculos públicos.
Reacciones encontradas: Celebración y resistencia
La noticia de la prohibición desató una ola de celebraciones entre los animalistas, quienes se manifestaron en las calles al ritmo de tambores y trompetas, coreando consignas a favor de los toros. Por otro lado, los taurinos, sintiéndose derrotados, protagonizaron enfrentamientos con la policía y anunciaron una mesa de diálogo con el gobierno de la capital. El torero Arturo Macías, citado por Milenio (Domínguez, 2024), lamentó la medida, argumentando que podría tener consecuencias negativas para la crianza del toro de lidia, condenándolo a morir en el rastro.
El futuro incierto de la fiesta brava
La prohibición de las corridas de toros con violencia en la Ciudad de México abre un nuevo capítulo en la historia de la tauromaquia. Aunque se permite el toreo sin sangre, la viabilidad económica y cultural de esta práctica se encuentra ahora en entredicho. La mesa de diálogo entre los taurinos y el gobierno capitalino se presenta como una oportunidad para buscar alternativas y soluciones que permitan preservar la tradición taurina de manera respetuosa con los derechos de los animales.
Consideraciones finales
Esta decisión, impulsada por la jefa de Gobierno, Clara Brugada, está generando un intenso debate sobre la tradición, la cultura y los derechos de los animales. La sociedad mexicana se encuentra reflexionando sobre el papel de la tauromaquia en el siglo XXI y buscando un equilibrio entre la preservación de las tradiciones y la promoción del bienestar animal.
Referencias
- Domínguez, P. (2024). Consensos y protestas vaticinaron prohibición de corridas de toros con violencia en CdMx. Milenio. Recuperado de https://www.milenio.com/politica/comunidad/asi-fue-la-prohibicion-de-corridas-de-toros-en-cdmx