La coordinadora del Partido Acción Nacional (PAN) en la Cámara de Diputados, Noemí Luna, advirtió que su partido mantendrá una firme ofensiva contra la llamada "ley de supremacía dictatorial". Esta polémica reforma, aprobada y publicada en cuestión de horas, ha generado preocupación entre opositores y expertos, quienes la consideran un grave atentado contra la división de poderes y el Estado de derecho.

Supremacía constitucional: un ataque a la democracia

Según Luna, las modificaciones a los artículos 105 y 107 de la Constitución Mexicana rompen con el principio de división de poderes, eliminan el sistema de pesos y contrapesos y anulan cualquier medio de impugnación judicial contra cambios constitucionales dañinos. La legisladora panista calificó esta reforma como una de las más "aberrantes" promovidas por el actual gobierno y acusó a Morena y sus aliados de redoblar sus ataques contra la democracia.

Una reforma peligrosa

Luna advirtió que la reforma abre la puerta a imponer cambios violatorios de los derechos humanos y los principios democráticos. A su juicio, esta medida acaba con el federalismo, dejando a los estados indefensos ante las imposiciones del gobierno federal y convirtiendo a México en un país donde el poder se concentra en una sola persona o un pequeño grupo. Por ello, la lideresa del PAN exigió un México donde se respeten la pluralidad y diversidad de opiniones, con un Poder Judicial verdaderamente independiente y donde se garanticen los derechos a la democracia y la justicia.

La ofensiva del PAN contra esta reforma se suma a la de otros partidos opositores y organizaciones civiles que han denunciado el retroceso democrático que implica. La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) todavía no se ha pronunciado sobre la constitucionalidad de la reforma, pero se espera que en los próximos meses se pronuncie al respecto.

"No cederemos ante la tiranía ni permitiremos que callen nuestras voces. Nuestra lucha por un México mejor sigue".

- Noemí Luna, coordinadora del PAN en la Cámara de Diputados

Mientras tanto, el PAN y otros actores políticos y sociales continuarán defendiendo la democracia y el Estado de derecho, que están siendo amenazados por esta preocupante reforma.