Los etarras confiesan su implicación en el asesinato de José Luis López de Lacalle
Los etarras Aitor Aguirrebarrena y Asier Arzalluz, alias Peio y Santi, **han confesado** este martes su participación en la muerte de José Luis López de Lacalle, el intelectual antifranquista y columnista de El Mundo asesinado en 2000 de cuatro tiros.
Detalles del atentado
El asesinato de López de Lacalle tuvo lugar el 7 de mayo de 2000, en Andoain (Gipuzkoa). El intelectual **fue tiroteado** por el etarra José Ignacio Guridi Lasa, quien le disparó dos balazos en el tórax y abdomen, y otros dos en la cabeza cuando ya había caído al suelo.
Aguirrebarrena y Arzalluz formaban parte del comando Ttotto, liderado por Guridi y que operaba a las órdenes de Francisco Javier García Gaztelu, Txapote. Según **han confesado**, ambos participaron en las vigilancias previas a la víctima y dieron cobertura a Guridi el día del atentado.
Proceso judicial
En 2002, la Audiencia Nacional condenó a Guridi a 30 años de cárcel como autor material del crimen. En 2009, el tribunal impuso la misma pena a Txapote por ordenar el asesinato.
Sin embargo, durante más de dos décadas, ha quedado pendiente **enjuiciar** a los dos terroristas que dieron cobertura a Guridi. Este martes, Aguirrebarrena y Arzalluz han reconocido los hechos durante el juicio celebrado en la Audiencia Nacional.
Motivación del asesinato
La primera sentencia de 2002 ya dejó claro por qué la banda ETA puso a López de Lacalle en la diana: «[Lo mataron] por ser un periodista que opinaba libremente y mantenía ideas propias y distintas a las de la organización terrorista [...], [trataron así] de silenciar y destruir la libertad de expresión constitucionalmente consagrada».
Sobre José Luis López de Lacalle
López de Lacalle, de 62 años, era un significado miembro del Foro de Ermua y columnista del diario El Mundo. Natural de Tolosa (Gipuzkoa), durante la dictadura franquista, había sido encarcelado por pertenecer al Partido Comunista y participó en la creación de CC OO.