Indignación en las calles de Valencia tras el desastre de la DANA

Multitudinaria manifestación exige la dimisión del presidente de la Generalitat, Carlos Mazón

Miles de personas se manifestaron el sábado 9 de noviembre en Valencia para exigir la dimisión del presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, por la gestión de la DANA que asoló la región el pasado 29 de octubre.

La manifestación, convocada por más de 40 asociaciones y grupos cívicos, recorrió las calles del centro de la ciudad hasta la plaza del Ayuntamiento, donde los manifestantes lanzaron bengalas, cartones y basura contra la fachada del edificio consistorial.

"Nosotros manchados de barro, vosotros manchados de sangre", se leía en una de las pancartas que portaban los manifestantes, en alusión a la tardanza en enviar la alerta masiva a los móviles que prevenía de la riada.

Los manifestantes también criticaron el almuerzo que Mazón mantuvo en un conocido restaurante de Valencia mientras la DANA ya había causado estragos en la región y exigieron su encarcelamiento.

La marcha, una de las más multitudinarias en Valencia en décadas, aumenta la presión sobre Mazón, quien por ahora no se ha dado por aludido.

"El que avisa no es Mazón", "Mazón, cobarde, a las ocho ya era tarde"

Entre los lemas que se podían leer en las pancartas de los manifestantes estaban "El que avisa no es Mazón" y "Mazón, cobarde, a las ocho ya era tarde", en referencia a la tardanza en enviar la alerta masiva a los móviles.

También hubo pancartas que criticaban la gestión de otras autoridades, como el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la consejera de Interior de la Generalitat Valenciana, Salomé Pradas.

"La incompetence tiene sus consecuencias"

En el manifiesto leído al final de la manifestación, los convocantes denunciaron que Mazón envió la alerta pasadas las ocho de la tarde "para no comprometer los intereses de los empresarios y la ganancia del capital, puso en riesgo la vida de miles de trabajadores".

También hubo reproches al Gobierno central: "Hubo falta de agilidad y coordinación entre las administraciones autonómica y estatal", señalaron las organizaciones convocantes.

En la marcha, pacífica en general, se produjeron algunos incidentes aislados y al final, una carga de la policía. En el Ayuntamiento algunos manifestantes lanzaron bengalas y la policía respondió con empujones y porrazos.

Cuando la marcha llegó al palacio de la Generalitat, algunos de los participantes se acercaron a la puerta principal y la llenaron de pegotes de barro, basura, cartones, escobas sucias, monos blancos de los que utilizan los voluntarios en la limpieza de las ciudades inundadas y carteles con la cara de Mazón boca abajo.

También estamparon con pintura roja manos en las paredes y, en uno de los lados, escribieron "Mazón asesino" y dejaron un cartel que rezaba: "La incompetence tiene sus consecuencias".