Operación para recuperar el tesoro del castillo de Manzanares el Real

El castillo de Manzanares el Real, uno de los emblemas medievales más importantes de Madrid, ha sido vaciado de sus tesoros artísticos en una operación llevada a cabo por siete profesionales del arte y la restauración.

El objetivo de esta operación era recuperar las piezas históricas que pertenecían a la Comunidad de Madrid y que habían sido cedidas al castillo durante seis décadas.

Entre las piezas trasladadas se encuentran 10 tapices del siglo XVII, nueve alfombras, dos reposteros, cuatro cuadros del pintor valenciano José Maea, el cuadro de la Procesión de la Virgen de la Candelaria (siglo XVII) y el retrato anónimo de Fernando VII.

Estas obras han sido trasladadas a la Real Fábrica de Tapices y al almacén de obras de arte de la Comunidad de Madrid.

La operación se completó el 3 de enero y contó con la supervisión de una restauradora y una conservadora de Museos.

El futuro del castillo

El futuro del castillo de Manzanares el Real es incierto. La Comunidad de Madrid tiene la "voluntad" de que el tesoro regrese a su morada, pero no está del todo asegurado.

La alcaldesa socialista de Manzanares el Real, Alicia Gallego, ha propuesto que se utilice el castillo Viejo, que está en ruinas, para albergar las obras.

El castillo Viejo es un enclave lleno de preguntas sin resolver y que presenta similitudes con el castillo de Buitrago, de los siglos XIV y XV.

Contexto histórico

El castillo de Manzanares el Real fue construido en el siglo XV por los Mendoza, un linaje único que fue precursor en la inquietud artística del medievo.

Las piezas artísticas que albergaba el castillo eran utilizadas por los Mendoza para expresar su magnificencia y su poder.

El castillo fue cedido a la administración pública en 1965 y ha sido visitado por casi medio millón de personas entre 2019 y 2024.

"Los tapices que había en el interior del castillo, además de una funcionalidad artística, estaban pensados también para cosas más prácticas como proteger del frío, sobre todo en Castilla", explica Raúl Romero Medina, profesor en el Departamento de Historia del Arte de la Universidad Complutense de Madrid y experto arte medieval y moderno.

El vaciado del castillo ha suscitado reacciones encontradas. Unos creen que es necesario para proteger el patrimonio histórico, mientras que otros lamentan la pérdida de un atractivo turístico.

Citas

"Lo que debería prevalecer es que estos bienes estén bien conservados, bien gestionados y bien protegidos. Que cumplan con su función educativa y cultural, y que esto sea democrático, sin importar quién sea el propietario", afirma el profesor Romero.

"Y hay una cosa que debemos asumir desde ya. Este tipo de lugares en manos del Estado gozan siempre de mayores recursos. A la vista está el excelente estado de conservación en el que se encontraba. Pero ya se sabe, nos regimos por el derecho romano de la propiedad privada, y es lo que hay", añade.