La política española, una paradoja: se aprueba una ley con duros ataques de algunos partidos que la apoyan
Madrid, 16 de febrero - La política española sigue demostrando sus paradojas. Este martes, una propuesta del PSOE para reformar la ley penitenciaria y convertir a los funcionarios de prisiones en agentes de la autoridad ha salido adelante en el Congreso de los Diputados con un amplio respaldo, pese a las duras críticas recibidas por parte de algunos de los partidos que la han apoyado.
El PSOE defiende la medida
El diputado socialista José Luis Aceves defendió la propuesta alegando que es necesaria para proteger a los trabajadores penitenciarios de las amenazas, agresiones e intentos de homicidio que sufren en el desempeño de sus funciones. También recordó que sus compañeros en el Senado habían votado a favor de una propuesta similar presentada por el PP en abril.
El PP apoya "por responsabilidad"
Los populares, pese a sus críticas a la política penitenciaria del Gobierno, anunciaron su voto favorable "por responsabilidad". Sin embargo, lanzaron una batería de críticas tanto a la propuesta como a la gestión del Ministerio del Interior, Fernando Grande-Marlaska, al que acusaron de trasladar a los presos de ETA al País Vasco y de aumentar la concesión de semilibertades a los reclusos.
Crítica de Vox
El diputado de Vox, Javier Ortega Smith, no solo criticó la política penitenciaria del PSOE, sino también la reciente ley de amnistía. Dibujó una situación penitenciaria "inaceptable" para los trabajadores penitenciarios y reclamó mejoras salariales y un rejuvenecimiento de la plantilla.
Aliados del PSOE también critican
Los aliados parlamentarios del PSOE también se mostraron críticos con la propuesta. Enrique Santiago, portavoz de Interior y Justicia de Sumar, calificó la reforma de "insuficiente" y la encuadró en "una tendencia populista de reforzamiento del autoritarismo". Pilar Vallugera, de ERC, reclamó "políticas de izquierda" en el ámbito penitenciario, mientras que Jon Iñarritu, de EH Bildu, destacó que la propuesta no beneficia ni a los funcionarios ni a los internos.
Una paradoja más
La aprobación de esta propuesta es una paradoja más en la política española actual, donde las formaciones políticas a menudo se ven obligadas a apoyar medidas que critican duramente. En este caso, los votos del PP y Vox han sido claves para que la propuesta del PSOE salga adelante, pese a la oposición de sus socios parlamentarios.
