La primavera trae consigo la época ideal para sembrar tu huerta
Con la llegada de septiembre, la primavera se convierte en la estación ideal para comenzar una huerta en casa. Este momento ofrece una oportunidad perfecta para trasplantar plantas y sembrar hortalizas que prosperarán durante el verano.
¿Qué sembrar en primavera en Argentina?
La primavera es un momento ideal para preparar tu huerta, especialmente a partir de mediados o finales de septiembre cuando las temperaturas comienzan a subir. Durante esta temporada, es recomendable sembrar cultivos que prosperen del clima cálido y soleado. Entre ellos se encuentran el tomate, el morrón, el zapallo, el pepino y el zapallito.
Para quienes buscan una cosecha continua durante todo el año, pueden optar por hortalizas y verduras que se adaptan a diferentes estaciones, como rúcula, acelga, lechuga, rabanito, zanahoria, perejil, puerros, remolacha y espinaca.
Para añadir un toque especial a tus comidas, considerá sembrar plantas aromáticas como albahaca, orégano, tomillo, cilantro, eneldo y romero, que proporcionarán ingredientes frescos y aromáticos durante toda la temporada.
Factores a considerar para una huerta exitosa
Para cultivar una huerta con éxito, es fundamental considerar varios factores relacionados con el espacio de plantado. Primero, se debe identificar si las plantas que se desea cultivar se siembran directamente en el suelo o si es más conveniente iniciar un almácigo y luego trasplantarlas.
Además, es crucial plantar a la distancia adecuada para asegurar un crecimiento óptimo; por ejemplo, las lechugas necesitan estar separadas unos 20 a 25 centímetros entre sí, mientras que los tomates requieren alrededor de 50 centímetros.
Después de la siembra, se debe prestar atención a las posibles heladas tardías y a los aumentos de temperatura conforme se aproxima el verano. Es importante también conocer las necesidades de luz solar de cada planta, ya que algunas requieren más de 4 horas de sol al día, mientras que otras pueden prosperar con menos exposición.
Tiempo de cosecha
El tiempo de cosecha varía dependiendo del tipo de cultivo. Para plantas que producen frutos, como el tomate, el proceso es mucho más prolongado. La planta debe completar todo su ciclo: desde germinar y desarrollar tallos y hojas, hasta producir flores que deben ser polinizadas, formar los frutos, engordarlos y finalmente madurarlos.
En contraste, cuando se cosechan hojas, el proceso es mucho más rápido, ya que es una de las primeras partes de la planta en estar lista para la recolección. En este sentido, mientras que algunos cultivos pueden ser cosechados en cuestión de semanas, como los rabanitos o las hojas, otros, especialmente aquellos que producen frutos, pueden tardar entre dos y ocho meses en estar listos para la cosecha.