La Generalitat deja en manos de los municipios la regulación de las viviendas turísticas
La nueva normativa para la regulación de las viviendas turísticas en la Comunidad Valenciana otorga a los ayuntamientos el poder de frenar, limitar, controlar, sancionar e incluso hacerse con la recaudación de las multas por el incumplimiento de las reglas establecidas para estos establecimientos.
¿Quién tiene la competencia?
La administración autonómica, que tiene la competencia en esta materia, ha decidido delegar estas responsabilidades a los consistorios locales. Así lo han anunciado la consejera de Industria, Nuria Montes, y el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón.
¿Qué competencias tienen los ayuntamientos?
- Frenar o limitar el crecimiento de las viviendas turísticas.
- Inspeccionar, sancionar y recaudar las multas por incumplimiento de la normativa.
¿Por qué esta decisión?
La Generalitat argumenta que esta medida permitirá a los ayuntamientos decidir qué modelo de ciudad quieren y cómo limitar el uso de viviendas como alojamientos turísticos según sus circunstancias concretas. Por ejemplo, podrán establecer un máximo de viviendas turísticas por edificio o por barrio.
La postura del presidente de la Generalitat
Carlos Mazón ha asegurado que no existe ninguna lucha entre hoteles y apartamentos turísticos. Ha alabado la existencia de estos alojamientos como parte de la "oferta turística de calidad" y ha expuesto que solo el "crecimiento desordenado" genera efectos nocivos, como el encarecimiento de la vivienda y las dificultades de acceso a ella.
El papel del Gobierno central
Mazón ha pedido al Gobierno central una "respuesta común" al problema del crecimiento desordenado de las viviendas turísticas, ya que no se trata de un problema exclusivo de la Comunidad Valenciana.
Nuevos requisitos
El nuevo decreto incluye nuevos requisitos para las viviendas turísticas, como la obligación de contar con una recepción y la prohibición de los cajetines para llaves. También se ha modificado la obligación de comunicar la referencia catastral o el certificado de la comunidad de propietarios sobre la no prohibición del establecimiento de viviendas turísticas.
Otras variaciones
- El cambio de titularidad de la propiedad de la vivienda de uso turístico obliga a renovar la licencia.
- El alquiler de habitaciones pasa a ser sanción muy grave, con hasta 600.000 euros de multa.
- Las declaraciones responsables que se presenten en la Generalitat para obtener la autorización tendrán que renovarse cada cinco años.
