Mercados navideños mágicos en Europa: un viaje a la tradición
Europa es el lugar por excelencia para vivir la Navidad al estilo tradicional, con nieve, comidas y bebidas calientes, y abrigados suéteres. Sus ciudades mantienen vivas las costumbres de la época desde hace siglos, y una de las más populares son los mercados navideños.
Un paseo por encantadores mercados
Ubicados en los centros históricos o en parques, estos mercados albergan decenas de puestos de madera donde los visitantes pueden encontrar todo tipo de artículos navideños, desde adornos hasta comidas y bebidas para combatir las bajas temperaturas.
El ambiente navideño comienza a sentirse a finales de noviembre y se prolonga hasta finales de diciembre, o incluso hasta el Día de Reyes, según la ciudad. Visitar estos mercados es una forma única de sumergirse en el espíritu navideño que envuelve las fiestas de fin de año.
Una selección de mercados imperdibles
Madrid, España
La Plaza Mayor acoge 104 puestos en el mercado navideño más grande de la ciudad, ofreciendo una amplia variedad de productos festivos. También hay otros mercados similares, como el de la Plaza Juan Goytisolo y el de la Plaza de España, que incluye una pista de hielo.
Se recomienda visitarlos después de las 18:00 horas, cuando oscurece y la ciudad resplandece con la luz de 12 millones de lámparas LED. Del 28 de noviembre al 31 de diciembre.
Barcelona, España
En la Plaça de la Seu, rodeando la catedral, se instala la tradicional Fira de Santa Llúcia, celebrada en el mismo lugar desde 1786. Allí, los visitantes encontrarán todo tipo de objetos decorativos navideños, incluyendo el tradicional "tió", un tronco adornado que se golpea en los hogares catalanes para que obsequie regalos.
Otra tradición de la feria es la figura del "caganer", un personaje escatológico que forma parte del pesebre.
Roma, Italia
El principal mercado de la capital italiana se ubica en el majestuoso escenario de la Piazza Navona, alrededor de las espléndidas fuentes creadas por Bernini, como la Fuente de los Cuatro Ríos de 1651.
El mercado está dedicado a la Befana, una bruja buena, y en sus puestos se pueden encontrar adornos, figuras para el pesebre, juguetes, dulces navideños y caramelos. Entre ellos, destacan las "calze della Befana", unas medias típicas llenas de golosinas que la Befana regala a los niños el día de Reyes. Del 1 de diciembre al 6 de enero.
Trento, Italia
La región del Trentino, con claras influencias centroeuropeas, alberga múltiples mercados rodeados por el entorno alpino. El Mercatino di Natale, en las plazas Fiera y Cesare Battisti, se encuentra en el centro medieval de Trento y reúne un centenar de puestos de madera donde se pueden degustar delicias locales como el strudel de manzana, la polenta asada, el pastel de patata y el aromático vino caliente. Del 23 de noviembre al 6 de enero.
Estrasburgo, Francia
Al igual que en París, las luces navideñas inundan las calles y plazas del casco histórico de Estrasburgo. Las fachadas y tiendas de la Grande Île, de estilo medieval y rodeada de canales, se engalanan con infinidad de adornos y luces.
Su mercado, que data de 1570, es el más antiguo de Francia y se extiende por la Place Broglie, junto a la Ópera. Los comerciantes ofrecen artesanía alsaciana, golosinas, vino caliente y buñuelos.
Berlín, Alemania
La capital alemana acoge unos 60 mercados navideños distribuidos en bulevares, plazas, calles estrechas y museos. Uno de los más populares es el ubicado frente al palacio de Charlottenburg, que, con el castillo de fondo, ofrece un entorno único. Allí se pueden adquirir artesanías y joyas de calidad. Las casetas cuentan con calefacción para hacer frente al intenso frío invernal.
Erfurt, Alemania
El mercado navideño es el protagonista de la Domplatz, con la catedral de Santa María y la iglesia de San Severo como telón de fondo. Destaca la Gloriosa, la campana medieval de volteo libre más grande del mundo, fundida en 1497. Las casetas de madera, que cada año se cubren de nieve, crean una típica estampa navideña.
Salzburgo, Austria
El mercado de Christkindlmarkt se organiza desde el siglo XV alrededor de la catedral, a los pies de la fortaleza de Hohensalzburg. En este encantador entorno se pueden adquirir especialidades austriacas, vino caliente con especias y ponche, además de adornos navideños tradicionales, regalos y artículos religiosos.
En el mercado de Navidad de Salzburgo hay una amplia oferta para todos los gustos. Este popular destino atrae a numerosos visitantes cada año y es muy apreciado también por los lugareños. El programa cultural navideño incluye exposiciones de pesebres y eventos especiales, como el concierto Adventblasen, donde el conjunto Salzburger Turmbläser deleita con sus instrumentos de viento. Del 22 de noviembre al 24 de diciembre.