Partidos catalanes debaten su presencia en X ante la deriva de la plataforma
Desde que Elon Musk adquirió Twitter en 2022, transformándola en X, una controversia se está desarrollando entre los partidos políticos catalanes e instituciones. La interrogante principal es si deben abandonar la plataforma, en protesta por su percibida «deriva», o permanecer para mantener la conexión con sus seguidores. Esta disyuntiva está generando un intenso debate sobre el rol de los partidos y las administraciones en el contexto de esta red social en constante evolución.

El dilema de la permanencia en X
La decisión de permanecer o abandonar X no es sencilla. Por un lado, existe la preocupación por la dirección que está tomando la plataforma bajo la administración de Musk. Imágenes y políticas implementadas han generado controversia y han llevado a algunos a cuestionar la idoneidad de mantener una presencia activa. Por otro lado, está el valor de la plataforma como canal de comunicación con la militancia y la sociedad. Renunciar a este espacio podría significar ceder terreno a discursos que no se desean amplificar.
La situación está llevando a los partidos a sopesar cuidadosamente los pros y los contras. Algunos están optando por permanecer, argumentando que es crucial mantener un canal de comunicación abierto. Otros están considerando seriamente la posibilidad de retirarse, preocupados por la deriva de la plataforma y las interferencias percibidas en la política europea. «Es una mala idea dejar a la extrema derecha sola en X, porque reproducirá únicamente su discurso», señaló Carles Pont, profesor de la Universitat Pompeu Fabra (UPF), en declaraciones a EFE (EFE, 2024).

Voces que se alzan y posturas encontradas
Ada Colau fue una de las primeras figuras políticas en distanciarse de Twitter, incluso antes de la llegada de Musk. Según informa Ediciones EL PAÍS S.L. (2024), la entonces alcaldesa de Barcelona argumentó que la red social no le permitía «hacer buena política». Más recientemente, figuras como Ernest Urtasun, Yolanda Díaz y Sira Rego también optaron por abandonar X, siguiendo los pasos del alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, quien denunció la plataforma como un «pozo de noticias falsas» (EFE, 2024).
Dentro de los partidos, el debate también está vivo. Comuns reconoce que están discutiendo internamente su continuidad en X, mientras que la CUP está evaluando sus opciones. En contraste, Vox celebra la existencia de una plataforma que, a su juicio, «no censura», y Aliança Catalana comparte esta postura. Junts y el PPC han optado por quedarse, argumentando que cerrar sus perfiles implicaría «perder un canal de comunicación» valioso (EFE, 2024).
ERC, por su parte, reconoce el alcance que ofrece la plataforma y advierte que renunciar a este escaparate significaría «ceder espacio» a la ultraderecha. Por lo tanto, el partido recomienda a sus miembros mantenerse en la red, aunque anima a explorar otras plataformas (EFE, 2024).
El papel de las instituciones y administraciones
El Ayuntamiento de Barcelona ha sido una de las principales administraciones catalanas en cerrar sus puertas en X. Desde enero, solo mantiene activa una cuenta para informar sobre emergencias y alertas. El Parlament, sin embargo, no se plantea abandonar la red, aunque sigue de cerca las decisiones de otras instituciones (EFE, 2024).
El Govern está evaluando «la conveniencia o no» de abandonar X y valora positivamente que otras instituciones mantengan cuentas activas para informar sobre emergencias. Fuentes del PSC aseguran que, por el momento, no se ha abierto el debate sobre la permanencia del partido en X, aunque respetan la decisión de quienes optan por salir (EFE, 2024).
¿Sobrevivirá X al debate?
El futuro de X como plataforma relevante para la política catalana está en juego. La velocidad con la que evoluciona la información y las redes sociales plantea interrogantes sobre la importancia de esta plataforma a largo plazo. Como señala Carles Pont, «quizá se está dando excesiva importancia» a X, y «probablemente, dentro de tres meses no será tan importante el hecho de estar o no en X» (EFE, 2024).
Mientras tanto, los partidos catalanes continúan debatiendo y sopesando sus opciones, buscando el equilibrio entre la necesidad de mantener un canal de comunicación abierto y la preocupación por la deriva de la plataforma bajo la administración de Elon Musk. El resultado de este debate podría tener un impacto significativo en la forma en que los políticos y las instituciones interactúan con el público en el futuro.