La plaza de Santa Ana pierde 40 árboles para ganar 300 nuevas plazas de aparcamiento

El Ayuntamiento de Madrid ha aprobado la reforma de la plaza de Santa Ana, en el céntrico barrio de las Letras, que supondrá la tala de 47 de los 54 árboles que tiene actualmente. El proyecto, que ha sido adjudicado al Grupo Ortiz por 45,8 millones de euros, incluye la construcción de un aparcamiento subterráneo con 296 plazas, de las cuales 110 estarán reservadas a residentes.

Los vecinos se manifiestan contra la tala de árboles

La tala de árboles ha generado una fuerte oposición entre los vecinos del barrio, que se han manifestado este martes para protestar contra el proyecto. Los vecinos consideran que la tala es innecesaria y que el Ayuntamiento debería buscar otras alternativas para solucionar los problemas de aparcamiento.

El Ayuntamiento defiende la tala

El Ayuntamiento, por su parte, defiende que la tala es necesaria para reparar las goteras que sufre el aparcamiento subterráneo y para aumentar el número de plazas de aparcamiento para los residentes. El delegado del Área de Gobierno de Urbanismo, Borja Carabante, ha asegurado que las talas "se van a revisar para minimizar la afección lo máximo posible" y que las obras están "dirigidas especialmente a los vecinos, que ahora no tienen donde aparcar"

El Grupo Ortiz se abstiene de hacer declaraciones

El Grupo Ortiz, que ha sido la empresa adjudicataria del proyecto, se ha abstenido de hacer declaraciones sobre el impacto ambiental de la obra.

La actriz Marisa Paredes se une a las protestas

La actriz Marisa Paredes, que creció en el barrio de las Letras, se ha unido a las protestas contra la tala de árboles. Paredes ha criticado duramente al alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, por no escuchar a los vecinos.

La reforma de la plaza de Santa Ana durará aproximadamente un año, y los vecinos temen que las obras afecten a la actividad comercial de la zona. Los hosteleros de la plaza han asegurado que las ventas bajarán un 20% durante el año que duren las obras.

El proyecto de reforma de la plaza de Santa Ana ha generado una gran polémica en la ciudad de Madrid. Los vecinos y los grupos ecologistas se oponen a la tala de árboles, mientras que el Ayuntamiento defiende que es necesaria para mejorar la plaza y aumentar el número de plazas de aparcamiento.