La alcaldesa de extrema derecha de Ripoll (Girona), Sílvia Orriols, se ha propuesto que el municipio, tristemente conocido por ser la cuna de los autores de los atentados de Barcelona y Cambrils, sea recordado también como un lugar de homenaje a las víctimas de aquellos ataques. El pueblo donde nacieron y crecieron Younes Abouyaaqoub y el resto de la célula yihadista que perpetró el 17-A ha rendido tributo por primera vez a las víctimas, coincidiendo con el séptimo aniversario de los ataques. Lo ha hecho con un monolito que contiene los nombres de las 16 víctimas mortales de aquellos ataques, que dejaron además 350 afectados por heridas físicas y secuelas psicológicas.

Orriols: "Contrarrestar actuaciones de otros gobiernos"

Según Orriols, este homenaje es una forma de "contrarrestar" las actuaciones de otros gobiernos municipales que, a su juicio, se han mostrado más cercanos a los familiares de los terroristas que a las propias víctimas. Al acto ha asistido la alcaldesa y líder de Aliança Catalana, pero no han acudido representantes del Govern de la Generalitat, a diferencia de lo que ocurrió con el acto institucional del sábado en La Rambla de Barcelona.

Recuerdos del 17-A, "muy vivos"

Unas 300 personas, entre vecinos y afectados por los atentados, se han unido al encuentro. Una de ellas, Iolanda Ortiz, vecina de la cercana Campdevànol, ha subrayado que para ellos el recuerdo del 17-A sigue muy vivo: "No se le puede pedir a una persona que tiene una vivencia similar que pase página porque está viva". Su hijo también ha tomado la palabra en el acto para denunciar, como llevan haciendo las víctimas estos últimos años, el abandono y el olvido de las instituciones.

Monolito en honor a las víctimas

El monolito, cubierto por una bandera catalana, ha sido destapado por la alcaldesa y por otra de las víctimas del 17-A, Elisabet Caritg. "En honor y memoria de las víctimas de los atentados terroristas de 2017", reza la escultura, que incluye los nombres y apellidos de las 16 víctimas mortales de Barcelona y Cambrils. La mayoría (14) murieron durante el atropello masivo en La Rambla. Younes Abouyaaqoub salió de Ripoll ese día al volante de una furgoneta alquilada e irrumpió en el paseo barcelonés hasta que el vehículo homicida quedó detenido sobre el mosaico de Joan Miró.

Un trauma todavía presente

Los atentados dejaron una profunda huella en Ripoll, que en el primer aniversario organizó unas jornadas por la convivencia pero, después, dejó de lado las conmemoraciones y trató de superar el trauma. Sin embargo, no lo ha conseguido aún. El hecho de que los autores de los atentados fueran vecinos, aparentemente integrados en la vida del pueblo, levantó muchas suspicacias. Y ayudó a Orriols a armar un discurso de odio hacia los musulmanes que, a la postre, le ha servido en parte para alcanzar la alcaldía.

Declarados "personas no gratas"

El pasado enero, el consistorio dirigido por Orriols declaró personas no gratas a los tres condenados por los atentados: Driss Oukabir, Mohamed Houli y Said Ben Iazza. Sin embargo, la alcaldesa se ha mostrado comedida en el acto institucional de este domingo. De hecho, ha agradecido la presencia de las víctimas "en un momento tan duro y en estas fechas tan señaladas".