Claudia Sheinbaum, futura mandataria de México, confirma la asistencia de integrantes del Poder Judicial a su toma de protesta
A pesar de las controversias ocasionadas por la reciente aprobación de la reforma al Poder Judicial, Claudia Sheinbaum, próxima presidenta de México, confirmó la participación de miembros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) en su toma de protesta en la Cámara de Diputados.
Asistencia de autoridades de los tres poderes
Sheinbaum señaló que su investidura es un acto republicano y protocolario, por lo que contará con la presencia de autoridades de los tres poderes de la nación. Aunque no especificó qué ministros asistirán, especialmente la presidenta de la SCJN, Norma Piña, destacó la importancia de la participación del Poder Judicial.
Invitados internacionales y gobernadores
En la ceremonia también estarán presentes representantes de más de 105 países, 22 organizaciones internacionales y 16 jefes de Estado. Además, acudirán los gobernadores de varias entidades del país.
Agenda posterior a la toma de protesta
Tras el acto protocolario en San Lázaro, Sheinbaum se trasladará a Palacio Nacional para tomar juramento a los miembros de su gabinete. Posteriormente, se tomará una fotografía con los invitados internacionales y pronunciará un discurso en la plancha del Zócalo.
El 2 de octubre, después de su primera conferencia de prensa matutina, se dirigirá a Acapulco para brindar apoyo a las víctimas afectadas por el huracán 'John'.
Posición de los ministros ante la reforma judicial
Durante septiembre, los ministros de la SCJN participaron en movilizaciones para impedir la aprobación de la reforma al Poder Judicial, promulgada y publicada en el Diario Oficial de la Federación por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
La presidenta de la SCJN, Norma Piña, participó en las marchas y aprobó el paro de labores en la Suprema Corte. Otro ministro que se manifestó en contra fue Jorge Pardo Rebolledo, quien rechazó la propuesta de elegir ministros, jueces y magistrados por voto popular.
Sin embargo, no todos los ministros estaban inconformes. Las ministras Lenia Batres Guadarrama y Loretta Ortíz apoyaron las movilizaciones a favor de la reforma.
"Para combatir la corrupción necesitamos una ley que la prohíba, autoridades que la cumplan y un pueblo que la observe. Ya tenemos al pueblo y, una vez aprobada la reforma, tendremos la norma jurídica y las autoridades electas por el pueblo mexicano para impedir la corrupción", dijo Lenia Batres en una manifestación.