El director general de Salud Pública y Equidad en Salud, Pedro Gullón, ha pedido este lunes calma ante la emergencia global declarada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) por la mpox. Gullón insiste en que no es "nada tremendamente nuevo" y subraya que, aunque la nueva variante extendida por África ya esté presente en España, el perfil de los nuevos casos no ha variado.

Tranquilidad y vigilancia

La declaración de la OMS llega un día después de que Suecia notificara el primer caso en Europa del clado II de mpox, actualmente en expansión por África y motivo de la segunda emergencia sanitaria global declarada por la OMS para esta enfermedad. En España, por el momento, no se ha detectado ningún caso de esta variante, pero el Ministerio de Sanidad no quiere tratar cada positivo como si se tratara de un virus nuevo.

"No estamos ante nada tremendamente nuevo, esto es un mpox que lleva circulando en España desde el año 2022," ha afirmado Gullón, aunque haya sido con otra variante, en concreto el clado II, cuya circulación también provocó una emergencia sanitaria en su momento.

La variante que se está extendiendo desde hace unos meses por 18 países africanos parece ser más grave y afectar a colectivos diferentes que la anterior, especialmente niños, pero Gullón pide mantenerse extremadamente prudentes porque la capacidad de detección y vigilancia en este continente es muy limitada, lo que implica que solo se detecten los casos más graves.

España, un país con alta incidencia

Por el momento, el Centro Europeo para el Control y Prevención de Enfermedades (ECDC) ha mantenido la clasificación de riesgo para Europa en bajo, aunque reconoce que es muy probable que sigan llegando casos importados del clado I de mpox.

Ante esta situación, el Ministerio de Sanidad está centrado en "ver que no ha cambiado el comportamiento de la enfermedad". Para ello, analizará junto con otros países de la UE la información disponible el próximo lunes y se "mejorarán los sistemas de vigilancia microbiológica para empezar a hacer estudios de si existen diferencias en gravedad, tipos de transmisión, etc.", ha explicado Gullón.

Lo que sí ha constatado hasta el momento es que los casos detectados en los últimos meses -264 desde enero- son similares a los que se vienen diagnosticando desde el principio, cuando estalló el brote en Europa en 2022 con la variante original.

"Son muy parecidos a los anteriores," sostiene el máximo responsable de salud pública, que insiste en que, aunque la nueva variante estuviera en nuestro país, "el perfil de los casos y la gravedad de los de aquí es la misma que hemos tenido durante desde el comienzo del brote en el año 2022".

Aún así, Gullón se muestra convencido de que, en cuanto se "refinen" los datos que llegan de África, "seguramente encontremos cada vez menos diferencias con lo que teníamos antes con el clado II, que es el que está circulando aquí desde 2022".

En 2022, España notificó más de 7.500 casos de mpox, que ascienden en este 2024 a un total de 8.104, lo que le convierte en el país con más incidencia de Europa. Esto no significa que haya más casos en España, sino que se ha estado vigilando, controlando y, por tanto, detectando más, aunque también han influido otros factores, como que el estallido del brote coincidiera con el arranque de grandes eventos multitudinarios y el aumento del turismo.

En cualquier caso, Gullón ha querido dejar claro que "la preocupación principal debería ser lo que está ocurriendo en el Congo y en los países de alrededor, pero especialmente allí, un país que está sumido en un proceso de conflicto armado desde hace tres años y que ya estaba con otros problemas grandes de salud pública y ahora suma uno más".

Algo que podría haberse mitigado si se hubiera aprobado el acuerdo de pandemias de la OMS, que habría permitido mejorar las capacidades de respuesta de otros países a emergencias como esta.