Veterinarios de Jalisco exigen leyes más estrictas para proteger a los animales

Tras el asesinato del veterinario Héctor Hernández Cañas en el Estado de México, veterinarios de Guadalajara se unieron al paro nacional y realizaron una protesta para exigir mejores leyes de protección animal en Jalisco.

  1. Respeto a la profesión: Los veterinarios demandan que se respete su profesión y se les reconozca como profesionales de la salud que brindan un servicio esencial para el bienestar animal y la salud pública.
  2. Dignificación del médico veterinario zootecnista: Solicitan que se dignifique su trabajo y se les otorguen condiciones laborales justas, incluyendo salarios dignos, seguridad social y protección contra la violencia.
  3. Condena a la violencia: Los veterinarios condenan enérgicamente la violencia contra sus colegas y exigen que se tomen medidas para prevenir y sancionar estos actos.

Durante la protesta, los veterinarios marcharon desde el Instituto Cultural Cabañas hasta la Plaza de Armas, donde entregaron un pliego petitorio al gobierno estatal.

«Hemos vivido acoso y violencia por parte de los propietarios que exigen garantías o que quieren que salvemos animalitos que ya vienen en condiciones muy precarias. Nosotros tenemos una clínica y justo cuando pasó lo del médico que asesinaron, a los días nos empezaron a acosar en redes y la verdad es que ya es muy cansada esta situación», comentó un representante del grupo.

Los veterinarios también hicieron un llamado a la ciudadanía para que sea responsable en el cuidado de sus mascotas y busquen atención médica veterinaria de manera oportuna cuando sus animales enfermen.

El caso de Héctor Hernández Cañas

El paro nacional de veterinarios se originó tras el asesinato de Héctor Hernández Cañas, quien fue presuntamente asesinado por los tutores de una perrita a la que no pudo salvar. El veterinario había denunciado amenazas y extorsiones por parte de los dueños del animal.

El caso de Hernández Cañas ha puesto de manifiesto la necesidad de leyes más estrictas para proteger a los veterinarios de la violencia y garantizar el bienestar animal.