El gestor del mercado de acciones de Suiza, SIX Group, adquirió en 2020, mediante una OPA, a su homólogo español, Bolsas y Mercados Españoles (BME). Un negocio con mucha competencia de operadores alternativos y que depende de los volúmenes de contratación de títulos (compraventas) de donde reciben un pequeño canon. Al igual que en otras plazas europeas, el mercado español ha visto caer su actividad en los últimos años. El 2023 cerró con un volumen de negocio de 306.920 millones de euros, un 68% menos que en 2015.
¿Qué hay detrás de la caída del mercado Español?
Otra muestra de las dificultades que atraviesan los gestores de los parqués bursátiles es que la cantidad de empresas que dejan de cotizar supera a las que entran: entre diciembre de 2009 y noviembre de 2023, las empresas cotizadas en el mercado principal pasaron de 133 a 120, una caída del 10%. Una de las claves de la caída de negocio en las llamadas Bolsas oficiales es la competencia de plataformas de contratación, nacidas al calor de la directiva Mifid en 2007, como Turquoise, BATS o Chi-X. Estas rompieron el monopolio de los mercados de valores, y actualmente negocian más en valores españoles que la propia BME.
¿Cuándo comienza a mejorar el panorama?
A pesar de años de caídas, en 2024 el negocio alcanzó los 145.408 millones de euros en renta variable entre enero y mayo, un avance del 4,1% respecto a 2023. Las previsiones de incorporar valores también han mejorado
¿Qué dicen los expertos?
"Somos optimistas. Las dos mayores salidas a Bolsa en el mundo hasta ahora, Puig y Galderma, se han celebrado en los mercados de SIX, en España y Suiza. Y se mantienen la actividad en BME Growth y BME Scaleup, donde esperamos recibir más compañías próximamente", explica Jos Dijsselhof, consejero delegado de SIX.
¿Qué reflejan los resultados de SIX?
El mal momento del mercado español se reflejó en los resultados de SIX al cierre de 2023: obtuvo unas pérdidas netas de 1.006 millones de francos suizos (1.048 millones de euros) por el impacto de ajustes contables valorados en 1.200 millones de francos suizos en relación con BME y su filial de pagos Worldline.
¿Qué rescatan de la situación?
Pero Dijsselhof prefiere referirse a lo que han aportado estos negocios y al resultado operativo con un beneficio de explotación (ebitda) de 413,4 millones de francos suizos (426 millones de euros). "En los últimos cinco años, el ebitda de SIX se ha duplicado y la incorporación de BME tiene mucho que ver con ello. El 34% del beneficio operativo y un 18% de los ingresos proceden de BME, lo que demuestra la importancia de España para todo SIX", indica el principal directivo del grupo suizo.
¿Qué planes a futuro tiene SIX?
Respecto a Worldline, afirma que sigue siendo un valor "estratégico". Es un socio clave en su oferta de pagos, en particular para los bancos suizos.
En la última década, para hacer frente a la mayor competencia y sufragar las inversiones necesarias en tecnología, las Bolsas europeas han vivido un intenso proceso de concentración. El responsable de SIX Group no ve necesaria otra vuelta de tuerca en ese proceso. Eso sí, advierte de que para que el continente pueda competir con Estados Unidos se necesitan más cosas de las que puedan hacer los propios operadores por sí mismos.
"Trabajamos de forma incansable para ofrecer el mejor servicio a nuestros clientes. Somos el mercado con mejores horquillas de precios para los valores españoles y suizos, respectivamente, en ambos países", indica. Y añade: "La competitividad de los mercados de capitales europeos depende mucho más del impulso regulatorio y fiscal que deberían tener. En un contexto de gran competitividad, es importante que los inversores vean a Europa como un área tan atractiva como Estados Unidos. Es un trabajo que interpela a todas las partes implicadas: gobiernos, reguladores, infraestructuras de mercados y comunidad inversora", concluye.