Stellantis afronta la crisis de la automoción en Europa con un desplome del 20% en sus ventas mundiales
El sector automovilístico europeo atraviesa un momento crítico, y Stellantis, el segundo mayor fabricante del continente, no es ajeno a esta situación. La compañía ha anunciado una caída del 20% interanual en sus entregas de vehículos durante el tercer trimestre del presente ejercicio, con un total de 1,15 millones de unidades vendidas. En lo que va de año, el descenso acumulado se sitúa en el 11,9%, con algo más de cuatro millones de entregas.
Exceso de inventario en Estados Unidos
Stellantis apunta al exceso de inventario en sus redes comerciales de Estados Unidos como el principal responsable de estos resultados. En su mayor mercado, la compañía ha reducido sus entregas en el tercer trimestre en 170.000 coches, de los cuales 100.000 corresponden a un recorte en la producción para permitir que los concesionarios den salida al stock acumulado. Sin embargo, Stellantis observa una mejora en esta situación, con una reducción del inventario del 11,6% respecto a finales de junio.
Cambio en la cartera de productos y retrasos en Europa
La compañía también atribuye el descenso de las ventas a un cambio en su cartera de productos, que se está orientando hacia una oferta multienergía con diversas opciones de motorización. A finales de 2024, Stellantis tiene previsto lanzar en Estados Unidos modelos como el Dodge Charger Daytona y el Jeep Wagoneer S.
En Europa, el grupo con sede en Ámsterdam se enfrenta a retrasos en la entrega de vehículos fabricados en su plataforma Smart Car, entre los que se encuentra el Citroën C3, un modelo llamado a ser un superventas de la marca francesa. No obstante, la compañía muestra optimismo en cuanto al lanzamiento de nuevos productos en Europa, con pedidos de 50.000 unidades del nuevo Citroën C3 y 80.000 unidades del nuevo Peugeot 3008.
Dificultades financieras y ajustes en el sector
El mal momento que atraviesa Stellantis se refleja en sus resultados financieros, con una caída de casi la mitad de sus beneficios netos en el primer semestre de 2024, situándose en 5.647 millones de euros. Esta situación ha situado a la compañía como la cuarta automovilística europea en términos de beneficios, por detrás de Volkswagen, Mercedes-Benz y BMW.
Ante las turbulencias del mercado, todas las grandes automovilísticas europeas han ajustado sus previsiones de ventas y beneficios para el año. Volkswagen, el fabricante europeo con mayores beneficios hasta la fecha, contempla el posible cierre de plantas en Alemania y negocia con el sindicato IG Metall un recorte de personal que podría afectar a decenas de miles de trabajadores.
"La situación del sector automovilístico europeo es compleja, con una competencia feroz por parte de las marcas chinas, una demanda débil en Asia y un mercado europeo que aún no ha recuperado sus niveles de ventas prepandemia", afirma Manu Granda, periodista especializado en economía.
Ejemplo: Extracto de la noticia:
"La crisis del motor europeo es evidente. Tras unos resultados comerciales decepcionantes de Volkswagen, este miércoles el segundo mayor fabricante europeo, Stellantis, ha informado de que sus envíos de coches se han desplomado un 20% interanual en el tercer trimestre del ejercicio, con casi 1,15 millones de unidades."