La crecida de los ríos mantiene en vilo a comunidades en Toledo, Madrid y Ávila

Mientras la borrasca Martinho continúa su paso por España, varias comunidades en Toledo, Madrid y Ávila están lidiando con las consecuencias de la crecida de los ríos. En particular, el municipio toledano de Escalona está sufriendo de manera significativa, con un centenar de familias desalojadas debido al aumento del caudal del río Alberche.

Escalona bajo el agua: Un río desbordado

El río Alberche, normalmente con un caudal de 14 metros cúbicos por segundo, ha experimentado un aumento extraordinario, alcanzando los 400 metros cúbicos por segundo. Este incremento ha provocado que el río inunde unas 200 viviendas en Escalona, según informa Álvaro Gutiérrez, alcalde del municipio. Los residentes están viviendo momentos de angustia, observando constantemente el cielo y temiendo que las crecidas continúen.

«Este sábado esa cifra ha escalado a los 400, es algo absolutamente extraordinario», enfatizó Gutiérrez (E. Reina, 2025).

Antonio, uno de los residentes afectados, relata cómo su hermano perdió su casa debido a la inundación, y cómo él y su esposa se preparan para evacuar con lo esencial. La situación es crítica, y la ayuda de los bomberos ha sido crucial para rescatar a personas atrapadas por las aguas.

El drama de los desalojos y la incertidumbre

En las últimas 24 horas, 40 familias han sido desalojadas, sumándose a las 60 que ya habían sido evacuadas en días anteriores. El Polideportivo municipal se ha habilitado como albergue provisional, aunque muchas familias prefieren buscar refugio con parientes en Madrid o en otros lugares.

Una operaria del Ayuntamiento, que prefiere permanecer anónima, comenta la dificultad de convencer a algunos residentes para que abandonen sus hogares, temiendo que la situación empeore rápidamente. Los equipos de emergencia están trabajando arduamente para asegurar que nadie quede atrapado en las viviendas afectadas.

«Hay gente a la que avisamos a las 5 de la madrugada de este sábado y que todavía esta tarde aún no se han ido. Esperemos que no suba más el agua y no sea demasiado tarde», cuenta la operaria (E. Reina, 2025).

Embalses bajo vigilancia y riesgo constante

La atención se centra en los embalses del Burguillo, Picadas y San Juan, ya que la cantidad de agua que liberen determinará el caudal del Alberche. Un total de 25 embalses pertenecientes a la demarcación del Tajo han superado el umbral de aviso rojo, y 19 presas están desembalsando de manera significativa, según informó Efe.

Ayuda gubernamental y apoyo a los afectados

Milagros Tolón, delegada del Gobierno en Castilla-La Mancha, ha ofrecido «toda la ayuda» del Ejecutivo central a las poblaciones afectadas por las crecidas de los ríos Tajo y Alberche. Tolón visitó Talavera de la Reina, otra de las zonas preocupantes debido a la crecida del río Tajo.

Ávila se estabiliza, pero la alerta persiste

En Ávila, aunque la situación se ha estabilizado después de que la parte baja de la ciudad amaneciera inundada el lunes, el temor a un posible deshielo sigue presente. Alfonso Fernández Mañueco, presidente de Castilla y León, ha decidido mantener el nivel 2 de emergencia, destacando que es necesario seguir vigilantes.

La guardería Mafalda, en la zona sur de Ávila, sufrió graves daños debido a la crecida de los ríos Adaja y Chico. Montse, la dueña, relata los destrozos causados por el agua, pero se muestra aliviada de que la inundación ocurriera por la noche, cuando no había niños en el centro.

Precauciones y avisos en otras comunidades

La borrasca Martinho continúa afectando a buena parte de España, con 14 comunidades en aviso por viento o nieve. La Aemet ha pedido especial precaución en la zona norte peninsular, donde las cotas de nieve bajarán. El riesgo importante por fenómenos costeros persiste en Asturias, Cantabria, Galicia y País Vasco.

  • Toledo: Crecida del río Alberche afectando principalmente a Escalona.
  • Madrid: Alerta por posibles crecidas, aunque los cauces se han estabilizado.
  • Ávila: Estabilización de la situación, pero con vigilancia ante el riesgo de deshielo.