Las conductoras de autobús de Madrid exigen jornadas de ocho horas y acceso a baños

Las conductoras de autobús de la empresa Martín en Madrid están en huelga desde hace más de un mes para exigir unas condiciones laborales más dignas. Entre sus principales reivindicaciones se encuentran la reducción de la jornada laboral a ocho horas y el acceso a baños durante sus turnos de trabajo.

Marta Herrera, una de las conductoras en huelga, lleva 19 años trabajando en el sector y asegura que la situación ha ido empeorando con el tiempo. "En vez de mejorar, ha empeorado", dice Marta. "Antes cumplíamos con las ocho horas y media, pero poco a poco nos han ido incrementando la jornada hasta las nueve horas actuales. Y eso sin contar el tiempo que tardamos en hacer el recorrido hasta la cabecera y volver a las cocheras, que no se cuenta como tiempo de trabajo".

A la jornada laboral excesiva se suma la falta de baños en los autobuses. "No es que no nos dejen ir al baño, es que nos presionan para que vayamos según el itinerario y esos diez minutos que inviertes en ir al baño corriendo ya hacen que llegues tarde", explica Elena, otra de las conductoras en huelga. "Te enfrentas a la gente que va a trabajar y tiene un horario".

Los riesgos de la fatiga

La fatiga es un problema grave para las conductoras de autobús, que pasan largas horas al volante. "Después de tantas horas seguidas, llega un momento que voy en automático. A veces no me doy cuenta de cómo he llegado a un sitio. Y llevamos personas, la tensión es mayor", dice Conchi, otra de las conductoras.

Los riesgos de la fatiga son evidentes. En los últimos años, se han producido varios accidentes provocados por conductores de autobús cansados. "Demasiado poco pasa", dice Conchi. "Ha habido gente con intentos de suicidio. La pena es que lleguemos a estar así por culpa del trabajo".

El apoyo de los compañeros

Las conductoras de autobús en huelga cuentan con el apoyo de sus compañeros masculinos. De los 350 conductores que hay en la empresa, 295 han firmado a favor de sus reivindicaciones.

"Uno de ellos me decía que lleva 37 años en la empresa y es la primera vez que se consigue que haya unión con la plantilla y el Comité y que nos plantemos", manifiesta Conchi.

Las respuestas de la empresa

Las respuestas de la empresa a las reivindicaciones de las conductoras no han sido muy prometedoras, según cuentan ellas. "Llevamos pidiendo baños toda la vida", dice Marta. "La empresa nos da largas y así pasan años".

Por su parte, el Consorcio Regional de Transportes de Madrid ha explicado a Madrid Total que "Autobuses Martín está gestionando la implantación de estos baños con los ayuntamientos para que se puedan instalar en los lugares donde les autoricen".

En cuanto a los horarios, "la empresa ha hecho más de seis propuestas de montaje de servicios ajustando los turnos a la demanda de los trabajadores, pero aún no han conseguido un acuerdo con el Comité de Empresa", añaden desde dicha organización.

La importancia de la jubilación anticipada

Las conductoras de autobús de Madrid no son las únicas que piden una mejora de sus condiciones laborales. En toda España, los conductores de autobús llevan años reclamando la jubilación anticipada a los 60 años bajo el lema "la fatiga mata".

Esta reivindicación contó en 2022 con más de 50.000 apoyos en la plataforma Change.org, pero finalmente no consiguió su propósito.

Conclusión

Las conductoras de autobús de Madrid están en huelga desde hace más de un mes para exigir unas condiciones laborales más dignas. Entre sus principales reivindicaciones se encuentran la reducción de la jornada laboral a ocho horas y el acceso a baños durante sus turnos de trabajo.

La empresa no ha dado respuestas muy prometedoras a sus reivindicaciones, pero las conductoras cuentan con el apoyo de sus compañeros masculinos y de los usuarios del transporte público, que saben que la fatiga de los conductores puede poner en riesgo su seguridad.