La economía española crece un 3,2% en 2024 por el impulso del turismo y la inmigración

La economía española continúa en auge, registrando un crecimiento del 3,2% en 2024, según el avance publicado por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Este crecimiento supera significativamente la media europea y muestra una aceleración respecto al 2,7% registrado el año anterior.

Motores del crecimiento

Tres factores principales contribuyeron a este crecimiento: el turismo, la inmigración y el consumo público. El turismo, que se ha reactivado tras la pandemia, ha alcanzado cifras récord, impulsado por una fuerte demanda y un aumento del gasto.

La inmigración también ha desempeñado un papel crucial, compensando la disminución de la población autóctona debido al envejecimiento y cubriendo las necesidades de mano de obra. Según la Encuesta de Población Activa, el 88% del empleo creado en 2024 correspondió a trabajadores extranjeros o con doble nacionalidad.

Por último, el consumo público ha seguido aumentando, especialmente en las comunidades autónomas, apoyado por el aumento de los ingresos públicos derivados de la inflación.

Puntos débiles

A pesar de este crecimiento positivo, existen algunos puntos débiles. La productividad, que es esencial para el crecimiento sostenible, no ha despegado como se desearía. El turismo, la inmigración y el consumo público no suelen impulsar la productividad.

Otra debilidad es la inversión privada, que ha sido el capítulo más rezagado en la recuperación de la pandemia. Sin embargo, esta situación comienza a mejorar con el descenso de los tipos de interés y el crecimiento económico previsto.

Crecimiento per cápita

El crecimiento del PIB per cápita no ha sido tan sólido como el del PIB general debido al aumento de la población. Lo mismo ocurre con el consumo per cápita, que todavía se ve afectado por la inflación y las subidas de tipos.

Previsiones

Para los próximos trimestres, se espera que el crecimiento de la economía española supere con creces la media europea, lo que debería atraer inversiones. Sin embargo, es necesario abordar los puntos débiles para garantizar un crecimiento sostenible a largo plazo.

— Antonio Maqueda, El País