Málaga frena la proliferación de viviendas turísticas

El Ayuntamiento de Málaga ha decidido limitar las nuevas licencias para viviendas turísticas a inmuebles que dispongan de una entrada independiente. Esta medida busca frenar el aumento de este tipo de viviendas en la ciudad y evitar los problemas que generan para los vecinos, como el ruido, la masificación y la expulsión de los residentes.

En los últimos años, el número de viviendas turísticas en Málaga se ha multiplicado por catorce, pasando de 846 en 2016 a más de 12.000 en la actualidad. Este crecimiento ha sido impulsado por la creciente demanda de este tipo de alojamiento por parte de los turistas, pero también por la falta de regulación.

La nueva normativa establece que las viviendas turísticas deben tener una entrada independiente del resto del edificio. Esta medida pretende garantizar que los turistas no molesten a los vecinos y que el edificio mantenga su uso residencial.

Además, el Ayuntamiento está trabajando en otras medidas para frenar el crecimiento de las viviendas turísticas, como limitar la reconversión de locales comerciales en viviendas turísticas y establecer un límite al número de viviendas turísticas que puede haber en cada barrio.

Estas medidas están siendo bien recibidas por los vecinos de Málaga, que llevan años denunciando los problemas que generan las viviendas turísticas. El Sindicato de Inquilinas e Inquilinos de Málaga ha convocado una manifestación para el próximo 29 de junio para reclamar más medidas para frenar el crecimiento de este tipo de viviendas.

El Ayuntamiento de Málaga se une así a otras ciudades españolas que han tomado medidas para frenar el crecimiento de las viviendas turísticas, como Barcelona, Madrid, Valencia y Sevilla.