Hábitos cotidianos que afectan negativamente la memoria

Hábitos cotidianos que afectan la memoria, según Harvard

Un estudio reciente de la Facultad de Medicina de la Universidad de Harvard ha identificado cuatro hábitos comunes que afectan significativamente la memoria y otras capacidades cognitivas esenciales. Según Rudolph Tanzi, codirector del Centro McCance para la Salud del Cerebro, estos comportamientos, aunque perjudiciales, son fáciles de modificar con un estilo de vida más consciente.

Tendencias Dormir mal a partir de los 50 puede acelerar el envejecimiento cerebralLa falta de sueño constante puede acelerar el envejecimiento del cerebro y afectar la memoria. A partir de los 50 años, los efectos del sueño deficiente en la función cognitiva pueden volverse más pronunciados.

Sedentarismo

Uno de los principales factores de riesgo es el sedentarismo. Estudios han relacionado el tiempo prolongado sentado con el adelgazamiento del lóbulo temporal medial, una región clave para la memoria. Este deterioro podría ser un signo temprano de demencia. Para contrarrestar este efecto, se recomienda levantarse y caminar cada 15 a 30 minutos, promoviendo pausas activas en la rutina diaria.

Tendencias El cerebro no es el único: Células en los riñones y tejidos nerviosos también almacenan recuerdosUn estudio revolucionario descubre que las células fuera del cerebro, como las de los riñones, tienen la capacidad de almacenar recuerdos, desafiando la creencia tradicional de que solo el cerebro es responsable de esta función.

Falta de interacción social

La falta de interacción social es otro hábito perjudicial. Harvard señala que el aislamiento aumenta el riesgo de deterioro cognitivo, Alzheimer y depresión. Mantener relaciones significativas con al menos dos o tres personas cercanas puede ayudar a estimular la salud cerebral y mejorar el bienestar emocional.

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Dormir menos de siete horas

Dormir menos de siete horas por noche también afecta la memoria y otras funciones cognitivas, como la resolución de problemas y la retención de información. Los expertos aconsejan establecer una rutina relajante y acostarse más temprano para garantizar un descanso de calidad, clave para prevenir problemas a largo plazo.

Estrés crónico

El estrés crónico completa la lista. Esta condición puede reducir la corteza prefrontal, responsable del aprendizaje y la memoria, además de dañar células cerebrales. Técnicas como la meditación, la respiración profunda y actividades relajantes pueden ser útiles para gestionar el estrés y proteger la salud cerebral.

Estos hábitos, aunque comunes, tienen un impacto significativo en el funcionamiento del cerebro. Es importante tomar conciencia de ellos y realizar cambios positivos en nuestro estilo de vida para mantener una mente saludable.

"Estos comportamientos, aunque perjudiciales, son fáciles de modificar con un estilo de vida más consciente." - Rudolph Tanzi, codirector del Centro McCance para la Salud del Cerebro