Desigualdad

México se encuentra entre las 49 economías más desiguales del mundo, según el Banco Mundial, lo que dificulta la reducción de la pobreza a pesar del crecimiento económico. La alta desigualdad limita la movilidad socioeconómica y obstaculiza la prosperidad compartida.

La renta media en España ha crecido un 4,7%, pero menos que la inflación en la mayoría de los barrios. La brecha entre ricos y pobres sigue aumentando, con La Moraleja (Madrid) como el barrio más rico y Torreblanca (Sevilla) como el más pobre.

Un estudio del Instituto de Investigación Urbana de Barcelona revela que el 70 % de los inquilinos en Madrid y Barcelona no esperan heredar una propiedad, perpetuando las desigualdades económicas.

El aumento de los alquileres está dividiendo a la sociedad entre quienes poseen propiedades y quienes no, con graves consecuencias para la economía y el bienestar social.

En medio de la creciente desigualdad de Madrid, los ricos disfrutan de experiencias cinematográficas exclusivas en las azoteas, ajenos a la realidad de la mayoría de los madrileños.

El crecimiento urbano desenfrenado alrededor de Bogotá está poniendo en peligro los ecosistemas y exacerbando las desigualdades, según advierten los expertos. En un foro organizado por la CAR Cundinamarca, expertos debatieron formas de proteger los ecosistemas y evitar las desigualdades en la región.

La diferencia de renta entre los municipios más ricos y más pobres de España sigue aumentando, superando los 70.000 euros. Madrid y Barcelona concentran las localidades más ricas, mientras que el sur del país alberga las más pobres.

La concentración de riqueza ha aumentado en las últimas décadas, con 3.000 familias controlando actualmente el 13% del PIB mundial. Esta desigualdad está impulsada por políticas económicas favorables a los ricos y la influencia corporativa, lo que lleva a la evasión fiscal, el impacto en el cambio climático y dificultades para los países en desarrollo.

Colombia enfrenta la trampa del desarrollo, un ciclo de crecimiento económico desigual que obstaculiza el bienestar de la población. Las raíces históricas y estructurales, como la desigualdad y la falta de educación, han perpetuado este problema. Abordarlo requiere reducir la desigualdad, formalizar la economía e invertir en educación.

La riqueza de los hispanos se ha triplicado en 10 años, pero aún existe una brecha significativa con la población general. La desigualdad se debe en parte a la juventud relativa de la comunidad latina y a las disparidades en educación, ingresos y acceso a capital.

España enfrenta contradicciones en su sistema de transporte, con un transporte público deficiente que contrasta con los lujosos vehículos privados. Este artículo explora las paradojas espacio-temporales y sociales que surgen de estas diferencias.

Madrid presenta una desigual distribución de piscinas en sus barrios, con escasez en el centro y abundancia en la periferia, especialmente hacia el norte. Esta desigualdad afecta el acceso al agua y la calidad de vida de los vecinos.

Madrid vive un auge económico y social sin precedentes, pero también un aumento de la desigualdad y la gentrificación.

El antropólogo José Mansilla analiza los efectos nocivos del turismo masivo en Barcelona y sostiene que es necesario tomar medidas para revertir la situación.

El G20 se encuentra dividido sobre la propuesta de un impuesto global para gravar a los multimillonarios, con Estados Unidos oponiéndose y otros países como Brasil apoyando la medida.

La desigualdad en Bogotá es alta, según el coeficiente de Gini, y se debe a factores como la pandemia, la diversidad de población y la atracción de migrantes.

Diez ciudades con mayoría latina en Estados Unidos tienen tasas de pobreza un 50% más altas que el promedio nacional, debido a desigualdad, alto costo de vida y falta de acceso a servicios.

La pobreza y la desigualdad en Ciutat Meridiana están provocando niveles alarmantes de tentativas de suicidio y problemas de salud mental. Las autoridades y los responsables sanitarios están tomando medidas para mejorar la situación.

Los datos del Ayuntamiento de Barcelona muestran una reducción de la brecha de rentas, pero la desigualdad sigue siendo significativa. El crecimiento económico ha beneficiado principalmente a los barrios más ricos.

La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, ha reclamado subir el IPREM y el salario mínimo para reducir la desigualdad. También ha pedido políticas para poner topes al precio de los alquileres y abaratar el coste de los alimentos.

Un estudio revela que la desigualdad ha aumentado en España en los últimos años, no solo en las ciudades más ricas como Madrid y Barcelona, sino también en localidades con menor renta como Torrejón de Ardóz o Vilanova i la Geltrú. El crecimiento económico, la vivienda y la distribución de la riqueza son algunos de los factores que influyen en este aumento.

Las comunidades aprovechan los márgenes de maniobra para modular impuestos, lo que ha provocado una carrera a la baja. Madrid es la que más ha recortado, mientras que Baleares es la que más ha recaudado.

Las mujeres de Cartagena enfrentan una serie de desafíos y desigualdades, como pobreza, inseguridad alimentaria, abuso sexual y desempleo. A pesar de las dificultades, demuestran resiliencia y luchan por un mejor futuro.

El sistema fiscal español no es progresivo y perjudica a la clase trabajadora, que paga más impuestos que las rentas altas. La clase trabajadora también exige mejores salarios y un empleo de calidad.